Si el proceso de compraventa de Twitter se concreta, Elon Musk será el nuevo dueño de la red social para finales de este año; y para entonces, además del dueño de la compañía, el magnate también tiene pensado convertirse en el CEO de la misma.
De acuerdo con un reporte del medio estadounidense CNBC, el magnate planea ser el director ejecutivo de la red social durante un tiempo limitado, que se extendería “unos pocos meses”, luego de que la transacción de la compra finalice.
Según fuentes del citado medio, Musk incluso cuenta con el apoyo de Jack Dorsey, cofundador de Twitter, para convertirse en CEO de la compañía. Actualmente y desde finales del año pasado, ese cargo lo ocupa el ingeniero de origen indio Parag Agrawal.
En una charla reciente con los trabajadores de Twitter, Agrawal expresó que la dirección de la compañía desconoce el rumbo que ésta tomará cuando la transacción finalice, pues es muy probable que Musk realice cambios importantes en la empresa en cuanto tome posesión como nuevo dueño y director ejecutivo.
Por el momento, los empleados de la plataforma se han mostrado preocupados por la posibilidad de perder su trabajo; al respecto, CNBC asegura que Musk les mencionó a los inversores de Twitter que la plataforma cuenta con “demasiados ingenieros que no hacen lo suficiente”.
Además, la junta directiva teme que Musk relaje las medidas que hasta ahora se han tomado respecto a la moderación de contenido, en aras de la apertura y la libertad de expresión a las que ha hecho referencia.
Por otro lado, hace unos días, el diario The Wall Street Journal dijo que algunas fuentes han informado que Musk tendría planeado vender Twitter dentro de tres años, una vez que haya mejorado la situación financiera de la empresa.
En este sentido, el objetivo de Musk de hacer que Twitter deje de cotizar en bolsa, es el de convencer a los inversores de que puede hacer más rentable rápidamente a la red social y así hacerla más atractiva.
