Para cerrar este especial, llegamos a la conclusión de que no se puede decir cuál es mejor, pero sí notar algunas diferencias importantes entre ellos que ayudan a tomar una decisión propia.
Cada sistema operativo es el mejor en lo que hace y cada uno tiene una manera muy particular y única de satisfacer las necesidades de los usuarios.
Si eres un usuario que gusta de personalizar su equipo (tanto en hardware como software), tener acceso a muchas aplicaciones gratuitas a través de más de un sitio web y que acepta el hecho de siempre estar a la expectativa de ser víctima de un virus, seguramente un Android es tu mejor opción.
Cada uno de los modelos con este sistema operativo está equipado con procesadores impresionantes que agilizan toda la actividad desempeñada y cada vez tienen pantallas con resoluciones y tamaños más grandes, pero hay que recordar que usan una máquina virtual que interpreta código, la cual siempre hace más lentos los procesos aunque no sea perceptible.
Apple se preocupa por dos cosas: experiencia de usuario y garantizar seguridad. Los dispositivos iOS no hacen uso de una maquina virtual, por lo que todos los procesos y/o animaciones se ejecutan en un tiempo insuperable y de manera óptima. Cabe señalar que cada nuevo modelo supera al anterior, así como la versión de iOS; a razón de esto es que dispositivos de años anteriores presentan lentitud en ejecuciones de procesos.
En la siguiente tabla enumeramos algunas funciones y características de los sistemas operativos y en ella se pueden ver las ventajas y desventajas de cada uno. El resultado final no pretende sesgar la opinión del lector, sino señalar las capacidades y limitaciones de cada uno, para que así el usuario pueda decidir cuál es el que más se ajusta a sus necesidades y preferencias.