A inicios de octubre, Facebook concretó la compra de WhatsApp por una cifra cercana a los $22 mil millones de dólares. Apenas un par de meses atrás, WhatsApp presumió poseer 600 millones de usuarios activos al mes. La ecuación parecía cerrada: una empresa bien valuada con una base de usuarios envidiable, igual a grandes ganancias. No ha sido así. Facebook publicó sus resultados financieros correspondientes al tercer trimestre del año, y destaca que WhatsApp apenas generó $10 millones en ganancias. En contraste, el mensajero diseñado por Jan Koum perdió $140 millones de dólares.
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Habría que ampliar la fotografía, pero la adquisición millonaria de WhatsApp no ha resultado rentable, al menos no en el corto plazo. Facebook cuenta con aproximadamente tres veces el número de usuarios de WhatsApp, y sólo entre julio, agosto y septiembre, generó ganancias por $3 mil 200 millones de dólares. La comparación no es del todo justa; Facebook monetiza su operación primordialmente con anuncios, mientras que el plan de nogocios de WhatsApp apenas comprende cobrar al cliente $1 dolar anualmente por el uso del mensajero.
Existe otro aspecto a considerar. No todos los usuarios de Facebook utilizan WhatsApp y viceversa. En ese sentido, Mark Zuckerberg, consejero delegado de Facebook, adquirió 600 millones de usuarios, más una empresa con un futuro prometedor. Como sea, los números lucen arriesgados. Desglosando la información, se observa que Facebook pagó $2 mil millones de dólares por los 600 millones de usuarios de WhatsApp, $448 millones por la marca, $288 millones por su tecnología y $15 mil millones “de buena voluntad”. Ninguno de los rubros pagados se cubre con los $10 millones generados por WhatsApp en el tercer trimestre.
La monetización de WhatsApp será el próximo reto para Mark Zuckerberg y su equipo. Recientemente, Facebook reafirmó que no incertará publicidad en WhatsApp, manteniendo el esquema de $1 dolar de cobro por servicio anual. Pero no es la única aventura financiera riesgosa en Menlo Park. En marzo, Facebook pagó otros $2 mil millones de dólares por la startup de realidad virtual Oculus.
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