Ford da una probada de su nuevo Centro de Pruebas Meteorológicas de última generación localizado en Alemania. El Weather Factory reúne todas las condiciones climatológicas del mundo bajo un mismo techo.
Weather Factory, el centro de pruebas de Ford
En ese lugar los ingenieros de Ford logran probar nuevos modelos, desde un pequeño Ford KA+, hasta una Ford Transit de dos toneladas, en condiciones extremas: altitudes superiores a las del Mont Blanc, velocidades del viento de hasta 250 km/h, nieve, luz solar intensa y lluvia; todo con sólo pulsar un botón.
Con una inversión de 70 millones de euros, las instalaciones cuentan con dos cámaras que pueden enfriarse hasta los -40oC, calentarse hasta 55oC, y generar 95% de humedad.
Los ingenieros pueden trabajar hasta con diez vehículos diferentes a la vez, las pruebas abarcan confort, seguridad y durabilidad, así como rendimiento eléctrico, frenos, aire acondicionado, potencia de torque, calefacción de la cabina y situaciones de atasco. También analizan los efectos de los vientos a alta velocidad en la carrocería, comprueban el rendimiento frente a la lluvia y a la nieve, y observan que tan rápido se descongela un parabrisas a diferentes temperaturas.
Está compuesto de varios laboratorios, cámaras y túneles, los cuales, cumplen una función específica para cada vehículo de Ford:
El túnel de viento 1, está preparado para pruebas de inmersión en temperatura caliente y en frío. Funciona con 28 focos de 4.000 vatios que ayudan a simular los potentes rayos solares, con la finalidad de comprobar la rapidez con la que se puede refrigerar la cabina. Este túnel de viento también puede evaluar el ruido interior de la calefacción y el aire acondicionado en diversas condiciones de velocidad, temperatura y nivel de humedad.
El túnel de viento 2, se utiliza por los ingenieros para crear nieve y lluvia, con la finalidad de comprobar su efecto sobre la visibilidad, arranque del motor y el tiempo que se tarda en calentar el interior del vehículo.
El túnel de viento 3 es el laboratorio de altitud, donde los ingenieros pueden probar vehículos con viento de hasta 120 km/h y una altitud de hasta 5.200 metros. Las pruebas de arranque en frío y durabilidad en altitud aseguran que los líquidos del vehículo no estallen cuando se trabajan bajo una presión más alta.
En total, del Centro de Pruebas Meteorológicas de Ford, requiere 11 mega watts de electricidad procedentes de fuentes sostenibles y certificadas en Escandinavia, así como de RheinEnergie, quienes cubren las necesidades energéticas de las instalaciones.