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Escáner revela fresco oculto en el Museo del Louvre


Gracias a un escáner, ha sido encontrada una pieza de arte dentro de otra. La ventaja de este dispositivo es que no daña las piezas a nivel molécular.

por: Carla L. G. Hurtado Carla L. G. Hurtado

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Un escáner con en el mismo tipo de tecnología utilizada en los aeropuertos ha revelado imágenes de un fresco oculto en el Museo del Louvre, en París. 

Se trata de un fresco debajo de la Trois Hommes Armes de Lances, que forma parte de la colección de Giampetro Campana, en una pared de la época romana. La nueva investigación sugiere que, debajo de esta pieza de arte, yace un fresco romano original

El descubrimiento fue anunciado en la reunión de la American Chemical Society, por Bianca Jackson, de la Universidad de Rochester en Estados Unidos. El escáner usado produce ondas Terahertz, las cuales son conocidas por su capacidad de penetrar los materiales sin dañarlos.

Las ondas Terahertz son similares a la luz infrarroja utilizada en controles remotos y algunos celulares. Ha llegado a ser popular en la tecnología de escaneo en aeropuertos y salas de museos, ya que puede extraer información de las piezas sin riesgo de daños. 

"Es muy importante la conservación del patrimonio cultural, ya que con un montón de otras técnicas, como los rayos X o ultravioleta, hay una cierta ruptura molecular en los materiales", dijo Jackson en la reunión. "Así que aunque se esté utilizando este escáner para obtener información, no se pone en riesgo cierto deteriorar objeto." 


Giampetro Campana era un coleccionista famoso desde mitades del siglo XIX, especializado en artefactos romanos. Pero al final de su carrera se dedicó a la restauración de piezas romanas. 

El fresco fue descubierto por los estudios previos de Trois Hommes Armes de Lances, en los que se había utilizado rayos X, los cuales producen una lista de todos los átomos dentro de un objeto y así fue como mostró que había átomos presentes en la obra que no correspondían en la superficie. 

El Jackson y sus colegas fueron llamados para aplicar un escáner de terahertz para averiguar lo que había debajo. "Después de un poco de procesamiento de datos, hemos sido capaces de sacar algunas señales de que hay "algo" por debajo, lo que parecen ser dos ojos, las cejas, la nariz, la boca, una sombra de barba", dijo.

Hasta ahora, queda demostrado que la imagen oculta es de origen romano y quizás se trate de la idea original de lo que se pretendía fuera esta pieza. 

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