De acuerdo con la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), durante los últimos años, los fraudes financieros bajo la modalidad de robo de identidad han aumentado considerablemente, afectando a miles de usuarios especialmente a personas de la tercera edad que utilicen tarjetas de crédito, débito y de los cuales hacen uso de los diferentes servicios ofrecidos por las Instituciones financieras.
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Son 3 los métodos por los cuales los ladrones de identidad han logrado suplantar a los usuarios de estos servicios, dichos métodos son el phishing, vishing y smishing.
A continuación, te explicamos en que consiste cada uno de estos métodos.
¿Qué es el phishing?
Es el delito de engañar a las personas para que compartan información confidencial como contraseñas y números de tarjetas de crédito. Por lo que, si recibes un mensaje informándote sobre movimientos inusuales en tu cuenta bancaria, podrías estar a punto de ser estafado mediante este método.
Es común que, a través de este tipo de correos electrónicos de alerta de movimientos bancarios, se encuentre un mensaje pensado para infundir miedo, con la intención de debilitar tu buen juicio. El mensaje exige que la víctima vaya a un sitio web y actúe de inmediato o tendrá que afrontar alguna consecuencia.
¿Qué es el vishing?
Se trata de una forma de timo en la que los ladrones de identidad intentan engañar a la víctima a través de una llamada telefónica, suplantando la identidad de otra persona o de una Institución financiera.
Por lo que, si recibes una llamada telefónica en la que un supuesto asesor bancario intenta ayudarte solicitando tu contraseña actual o cualquier dato personal, no se lo proporciones, ya que podrías ser víctima de un fraude.
“Ningún banco pide contraseñas, códigos de confirmación o verificación por teléfono, ni cualquier otro dato”, señaló la Condusef.
¿Qué es el smishing?
Se trata de una variante de phishing, mediante la cual los ladrones de identidad intentan obtener información personal a través de un mensaje de texto o SMS. El smishing es considerada una amenaza emergente y en crecimiento en el mundo de la seguridad en línea, ya que las personas tienden a confiar más en los mensajes de texto que en los mensajes de correo electrónico
Este tipo de mensajes pueden contener alertas falsas o enlaces a sitios web falsos, suplantando a una Institución financiera, por lo que, al entrar, un virus podría infectar tu dispositivo y robar tus datos.
¿Cómo protegerte ante el robo de identidad?
La mejor manera es identificar el número de contacto del remitente del mensaje de texto, pues comúnmente provienen de un número desconocido o no concuerda con el remitente que has recibido de tu banco.
Otra opción es cuando se establece una comunicación por vía telefónica, donde el primer filtro es un sistema de voz automatizada que se encarga de solicitar información confidencial.
Por último, se encuentra cuando hablas directamente con una persona y no puedas identificar su identidad rápidamente.
En caso de víctima de estos tipos de fraudes o robos de identidad, es necesario que acudas a tu Institución financiera más cercana para cambiar tus contraseñas, además, debes de realizar la denuncia correspondiente.
