Dos impresoras de comida en 3D que podrían ponerse en el mercado a finales del año fueron presentadas en Las Vegas esta semana durante el CES 2014. Estas impresoras pueden crear chocolate en formas que serían difíciles de producir utilizando métodos tradicionales de confitería a base de azúcar.
El modelo más pequeño, Chefjet, se limita a las creaciones monocromáticas, pero el más grande, la Chefjet Pro puede crear objetos multicolores. Sin embargo, los expertos dijeron que sus precios elevados podrían limitar las ventas. La versión básica costará unos $5 mil dólares (es decir, unos $65 mil pesos mexicanos) y el modelo mas grande podría doblar la cantidad. La compañía estadounidense que los produce se llama 3D Systems.
3D Systems desarrolló sus nuevos modelos "safe food" (comida segura), tras hacerse cargo de una start-up con sede en Los Ángeles desde septiembre del año pasado, personalizando una de sus máquinas para poder imprimir comida.
Ambos modelos pueden imprimir con sabores de chocolate, vainilla con azúcar, menta, manzana agria, cereza y sandía. A partir de imágenes, la Chefjet Pro es capaz de crear comida mediante la mezcla de diferentes ingredientes para que sean usados en pasteles u otras superficies.
Los diseños se construyen utilizando un proceso de impresión capa por capa. Los dulces son creados por la difusión de una fina capa de azúcar con sabor y, a continuación, la pintura de agua en la parte superior usando una cabeza de impresión a chorro que convierte la sustancia en cristales endurecidos.
Los precios pueden parecer disparatados para una persona, más no para una empresa. Es muy sabido que la NASA tiene los ojos puestos en estas máquinas. Son una opción muy buena para que los astronautas en las estaciones espaciales puedan tener y generar su propia comida al instante.