El gobierno de Irán derribó un drone de Estados Unidos en el Estrecho de Ormuz. Se trata de un modelo de vigilancia RQ-4A Global Hawk no tripulado con un valor superior a los 131 millones de dólares.
El drone, fabricado por la compañía Northrop Grumman, se encontraba realizando actividades de reconocimiento, inteligencia y vigilancia en tiempo real, aunque fue considerado como espía.
Con más de 10 años de vuelos, el modelo RQ-4A es utilizado por la Fuerza Aérea de los Estados Unidos así como la NASA, OTAN, la Fuerza Aérea de la República de Corea y la Fuerza Aérea de Autodefensa de Japón.
Irán comentó que el drone violó su espacio aéreo y por tal motivo, tuvieron que derribarlo. Cabe mencionar que es el primer ataque directo a Estados Unidos reclamado por Irán desde que inició el conflicto entre naciones.
Me arrepentí, Trump
En tanto, de acuerdo con información de The New York Times, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, habría suspendido un ataque contra Irán como represalia al drone derribado.
El ataque tenía considerados varios puntos estratégicos de las fuerzas iraníes, lo que podría haber generado hasta 150 bajas mortales.