Mustang es uno de esos coches que nacen, crecen, se reproducen y no mueren... No mueren porque logran convertirse en leyendas, levantar pasiones y ser en objetos de deseo para todo tipo de personas, desde los fanáticos de los autos deportivos hasta lo que sólo buscan clásicos sin importar el desempeño.
En diciembre del año pasado Ford mostró por primera vez la séptima generación de su célebre muscle car y de inmediato esta nueva propuesta dio de qué hablar, en lo personal me parece que este auto consigue una excelente comunión entre pasado, presente y furuto para Ford, pues en él se combinan elementos que rememoran y hacen una clara referencia a los modelos más clásicos de Mustang con el nuevo lenguaje de diseño de la marca del óvalo, de ADN vanguardista.
El músculo:
Todo, todo en este Mustang es nuevo, desde el chasis hasta los materiales del interior, pasando por la suspensión y el diseño del habitáculo que, dicho sea de paso, está inspirada en la cabina de un avión. Y para resumirlo, estas son las cosas y detalles que más llamaron mi atención y que creo que vale la pena mencionar:
1.- Considero que esta es una comunión casi perfecta entre el actual lenguaje de diseño de Ford, pero conserva el ADN de un Mustang y muchos elementos que han sido clásicos a lo largo de la historia de este coche.
2.- Me gusta mucho cómo Ford integró estos elementos clásicos, pero les dio una funcionalidad. El ejemplo perfecto son las luces de día en LED, que están situadas en lo que se conoce como las branquias que tiene el juego de luces principales, un elemento presente en los modelos más aclamados de este deportivo pura sangre.
3.- Vale la pena mencionar cómo el diseño va fluyendo hasta la parte postrior, terminando en unos grandes hombros que hacen que el auto luzca mucho más musculoso, robusto y pegado al piso. Al mismo tiempo, la parte de atrás del auto recuperó de manera extraordinaria las formas de los fastback de hace algunos años. Este Mustang tiene un cuerpo más ancho y es más bajo que su antecesor.
4.- El diseño de la parte posterior, que en lo personal es mi favorita, incluye los juegos de luces divididos en tres (también con tecnología LED), como en los mejores representantes de esta leyenda y que mantienen, en donde las regulaciones lo permiten, el encendido secuencial de la direccional clásico de Mustang.
¿Y adentro?
El interior también tiene mucho que decir respecto a la generación anterior. El diseño está inspirado en la cabina de una aeronave y eso me gusta y me resulta funcional. Uno de los detalles que más llamaron mi atención son los botones dedicados a encender las intermitentes, apagar o encender el control de tracción, seleccionar el modo de la dirección o el modo de manejo, que son muy aeronáuticos y retro en su diseño, y, lo más importante: su uso sencillo y funcional.
Tanto el control de aire acondicionado como las teclas dedicadas al sistema de audio incluyen botones de plástico, pero también tienen detalles tipo aluminio que acentúan el toque retro y sube la calidad de los materiales del nuevo Mustang.
El espíritu retro se fusiona con la tecnología un poco más arriba en el tablero, donde encontraos el sistema My Ford Touch en una pantalla táctil a color de ocho pulgadas.
El volante, por su parte, está repleto de botones: para el audio, para el control de crucero, para el teléfono y para controlar la pantalla secundaria, en la que ves toda la información del auto y accedes también al menú de aplicaciones de pista de las cuales hablaremos más adelante. Pero definitivamente lo que más me gustó de este volante, más allá de su diseño, ¡es que incluye paletas para cambiar las velocidades! Un gran punto a favor para esta nueva generación, pues tuvimos oportunidad de manejar un Mustang GT automático 2014 en pista y la posibilidad de cambios manuales era directo en la palanca a través de un botón, lo que resultaba incómodo y poco efectivo.
El tacómetro y velocímetro son dos grandes círculos análogos cuya personalización es muy amplia, pues puedes elegir entre cientos de combinaciones de colores para la iluminación de este panel y general del auto.
¡A relicnchar, potro!
Desempeño y motor son dos cosas ligadas de forma implícita a Mustang. Bajo el cofre, la nueva generación ofrece dos opciones de motor: El Mustang GT tiene la más reciente generación del motor V8 302 de 5.0 litros, que gracias a un rediseño tiene más caballos que su antecesor —pasó de 420 a 435— y brinda un consumo más eficiente de combustible. La otra opción es un motor de seis cilndros y 3.7 litros que desarrolla 300 caballos de fuerza y que también tiene cambios para ser más eficiente. En cuanto a la transmisión también hay dos opciones: una caja manual de seis marchas o la caja automática SelectShift, que ahora puede tener paletas de cmabios en el volante para el modo de manejo manual.
Y como un usuario mortal en carretera puedo decirles que la experiencia de manejo en el nuevo Mustang fue divertida, emocionante y rápida. Gracias a su nuevo diseño estamos en un auto grande, sí, pero también más ancho y más bajo, lo que quiere decir que es más estable y que se pega mejor en las curvas. Bajo el cofre teníamos el potente V8 5.0 y la sensación en la autopista era de potencia interminable, podíamos ir casi al límite, seguir pisando el acelerador y el auto no paraba de entregar potencia, torque y emociones fuertes... El nuevo Mustang es una bestia.
Por otro lado, vale la pena destacar que tenemos cuatro diferentes modos de manejo: Normal, Sport, Pista y Nieve/Agua. Al activar cada uno de ellos el coche ajusta el motor, acelerador, caja de velocidades y dirección para adecuarlo a ese estilo de manejo. Por ejemplo, en el modo sport y pista, el coche acelera mucho más rápido, porque el acelerador es más sensible; la dirección es más rígida y la dirección se endurece. Por su parte, el modo nieve/agua el Mustang cambia su configuración para ser más seguro; un ejemplo muy claro se puede ver en el arranque, pues se reduce la potencia para que no derrapes.
El nuevo Mustang también ofrece tres modos para la dirección: Confort, Normal y Sport.
En la pista
Y como habíamos visto antes, este coche tiene aplicaciones de uso exclusivo en pista. Puedes medir en cuánto tiempo aceleras de 0 a 100 km/h (y llevar un histórico de tus récords), las fuerzas G que se producen mientras manejas y cuánto tardas en frenar de 100 a 0 km/h ó de 200 a 0 km/h. Sin embargo, para la nueva generación Ford incluyó una nueva app: se llama Line Lock y básicamente ayuda a bloquear la línea delantera (llantas delanteras) para poder hacer arrancones —ya sabes, quemar llanta, sacar mucho humo, descargas de adrenalina y emoción.
El Mustang más tecnológico y puro...
¿Realmente qué tanta tecnología quermos en un auto como éste? Hay que tener en mente que es un auto deportivo, sí, pero también que el 99.99% del tiempo no vas a estar en un pista —de hecho hay gente que jamás lo meterá en un pista. Así que desde mi punto de vista mientas más tengamos, mejor. ¿Qué dice Ford al respecto? El nuevo Mustang es el más tecnológico hasta el momento, pero también el más puro…
Así pues, la marca del óvalo decidió incluir el sistema MyFord Touch, que viene acompañado de una pantalla táctil a color de 8 pulgadas y es en la que puedes ver todo el sistema de entretenimiento, mapas y aire acondicionado.
Como lo hemos visto ya en otros modelos Ford, puedes enlazar tu teléfono vía blutooth y controlar todo desde la pantalla, ver tu historial de llamadas, agregar contactos favoritos o incluso hacer streaming de música desde tu biblioteca o alguna app. Este Mustang cuenta con ranura para para tarjetas SD y dos puertos USB.
Nota relacionada: ¿Cómo funciona MyFord Touch y Sync en los autos Ford?
Por supuesto, cuenta control de tracción, cámara de reversa, sensores de proximidad, frenos ABS y ocho bolsas de aire, lo que lo hacen el auto más seguro de su segmento.
Finalmente tenemos acceso inteligente, eso quiere decir que no necesitas más que tener la llave en algún bolsillo, mochila o portafolio y abrir la manija para entrar. Además, tiene botón de start / stop y eso lo hace aún más deportivo.
Manejar la nueva generación de Mustang exaltó todos mis sentidos: su nueva estética atrajo mi vista, el olor de la piel en el interior del auto llenó mi olfato, manejarlo simplemente revolucionó mi tacto y desde el momento en que lo arranqué el sonido de su motor enamoró mi oído, que se comprometió con este auto cuando acelaraba a fonto en la carretera y el pura sangre relichaba a diestra y siniestra... Hacía mucho que un Mustang no causaba tanta emoción en mí.
Nos intersa tu opinión:
-¿Qué opinas del nuevo Mustang?
-En Estados Unidos se comercializará una versión con motor turbo de cuatro cilindros con más de 300 caballos de fuerza, ¿te gustaría verla en México?
-¿Te gusta el nuevo diseño?
-¿Crees que le hace falta algo a este deportivo?