Las luces exteriores del vehículo es una parte esencial para la seguridad de las personas, tanto pasajeros como peatones, por lo que es bueno conocer en qué momento se ocupan.
¿Cuándo usar correctamente las luces de mi auto?
Debes saber que los faros traseros son de color rojo, los laterales o direccionales ámbar, de reversa en color blanco y los delanteros amarillos o de luz blanca, salvo en vehículos de emergencias. Los tipos de luces pueden ser halógenas, xenón, LED y recientemente de proyección láser.
Luces cortas
Lo más seguro es usarlas durante el día y siempre de noche. También son la opción para días de niebla, lluvia o ante cualquier fenómeno atmosférico que no te permite ver. Cooper Tires nos recuerda que también se deben usar en túneles y carriles reversibles.
Luces altas
Lo aconsejable es usarlas únicamente de noche, en carreteras o en caminos poco iluminados. Con el fin de evitar accidentes se debe evitar el uso en ciudades.
Si vas en carretera con las luces altas o en carriles de reversibles se recomienda realizar cambio de luces cuando un vehículo se acerque en dirección contraria.
Luces intermitentes
Las usarás para indicar que has detenido el vehículo por alguna avería o factor externo. También debes usarlas cuando te estacionas por un corto tiempo en alguna calle.
Luces direccionales
Son luces intermitentes que deberás emplear, tanto de día como de noche, al momento de querer dar una vuelta a la izquierda o derecha. Con eso indicarás a los conductores que irás a la dirección deseada.
Faros de niebla
Diseñados específicamente para la niebla. Por lo que más quieras no las uses en condiciones normales, ya que pueden deslumbrar a otros conductores –muchos vehículos tienen luces traseras y esas afectan la vista de los conductores. Si la niebla es muy pesada también se recomienda utilizar intermitentes.