- Su diseño es casi impecable, además, es bastante accesible, por lo que no hace falta ser un experimentado videojugador o veterano de la serie para disfrutar del título. El modo Repetición permite apreciar el gran nivel de detalle del título. Jugarlo en compañía de manera presencial garantiza risas y uno que otro enojo.
- El modo Batalla emplea las mismas pistas que los modos de Carrera o Gran Prix, restando atractivo a este modo.
Entre Parentesis
Mario Kart 8 es la razón para adquirir un Wii U. Si ya posees esta consola, entonces este título es una compra obligada. La diversión está garantizada.
En algún momento de la generación pasada se perdió la tradición del multijugador presencial. Pasamos de juntarnos con los amigos en casa de tal o cual, a sentarnos en el sillón de nuestra preferencia para iniciar una sesión de juego en línea con hasta 31 personas más. En la mayoría de los casos jugamos con personas desconocidas, otras tantas lo hicimos con jugadores que no hablaban nuestra lengua, y las menos lo hicimos con "amigos". Mario Kart 8, la más reciente iteración de la prolífica serie de karts de Nintendo, revive el multijugador presencial y nos recuerda lo increíble que puede resultar compartir un juego de video en compañía de amigos o familiares, o incluso con desconocidos.
No sería una exageración si decimos que Mario Kart 8 es el mejor juego de la serie e incluso el mejor de su género —que recientemente se ha enriquecido con títulos como Sonic & All Stars Racing Transformed o Little Big Planet Karting—. Sustentamos lo dicho en que Mario Kart 8 cuenta con un excelso diseño: las pistas son tan variadas como coloridas, y las distintas combinaciones de personajes y karts ofrecen aproximaciones distintas al gameplay. ¿Buscas un personaje con velocidad tope y un buen manejo? Trata con Wario y alguno de los diversos karts que Mario Kart 8 presenta. ¿Lo tuyo es un buen arranque? Entonces Toad es tu personaje ideal. ¿Y qué tal probar una motocicleta? Después de todo, manejar un vehículo de cuatro ruedas o dos ruedas es una experiencia distinta, y Mario Kart 8 trata de emular —dentro de su género— esa experiencia.
¡Son las pistas, Nintendo!
Independientemente de lo atractivos que puedan ser los personajes de Mario Kart 8, sin lugar a dudas las pistas son las grandes protagonistas del juego. Durante nuestra primera sesión de juego corrimos en el Mario Kart Stadium, que básicamente es una amigable introducción a Mario Kart 8. Viejas mecánicas como el drifting —derrapar sobre las curvas para lograr un mini turbo— pueden ser probadas en este circuito sin el menor problema, pero también, Mario Kart Stadium introduce un nuevo elemento en le serie: antigravedad, que a grandes rasgos podría describirse como secciones de las pistas en las que el kart flota sobre la superficie y, literalmente, puede correr de cabeza. Es como si Mario Kart adaptara elementos de otra prolífica franquicia de Nintendo: F-Zero.
El siguiente circuito, Water Park, resulta un auténtico deleite visual. Plagado de tonos azules, Nintendo luce el encanto gráfico de Mario Kart 8, que por cierto, presenta gráficos en 1080p. Es en éste circuito donde las tres etapas de manejo del juego son más observables: sobre una superficie en ruedas o en modo "antigravedad", bajo el agua o por aire empleando un paraplente. Cierto, Sonic & All Star Racing Transformed realizó algo similar con mucho éxito el año pasado, pero el encanto de las pistas de Mario Kart 8, así como la posibilidad de optar por diversas rutas durante una misma carrera hacen del título de Nintendo una experiencia divertidísima.
Y es ahí, oh sorpresa, donde radica el punto más fuerte de Mario Kart 8, y el que estamos seguros Nintendo desea explotar para promocionar a su emproblemada consola Wii U: Mario Kart 8 es un título divertidísimo y accesible como pocos. Para nuestra prueba del título, entregamos Mario Kart 8 a veteranos de la serie —"Yo era bien bueno en el de Nintendo 64", señaló alguno— y a jugadores que jamás habían tocado un Gamepad: Ambos sonrieron durante toda su carrera, aunque claro, uno de ellos terminó en primer lugar, mientras que el otro… bueno, cruzó la meta.
Ciertamente, hay que destacar la accesibilidad de Mario Kart 8. El título sólo hace uso de cinco botones y de la palanca análoga izquierda, por lo que hacen falta no más de 10 segundos para explicar para qué sirve cada botón; lo demás ocurre por mera intuición. Y sin embargo, el gameplay de Mario Kart 8 puede ser increíblemente profundo y variado. ¿Tomarás la curva por la parte interior y emplearás un mini turbo para salir a toda velocidad por la recta, o tomarás la curva peraltada y la cajita con ítem? Cualquiera que sea la decisión que tomes —y lo harás en cuestión de segundos—, ésta afectará tu desempeño en la pista, sin mencionar que también la elección de tu personaje influirá en el rendimiento del kart o moto que hayas elegido.
Y, desde luego, están los ítems. Pocos ítems han recibido tantos insultos en los videojuegos como la icónica concha azul con espigas de Mario Kart. En total son los 20 ítems de Mario Kart 8, y van desde la clásica banana que nadie quiere recibir hasta una planta piraña que morderá y sacará de pista a cualquier rival que se encuentre cercano al poseedor. Y aunque los cuatro nuevos ítems —Flor búmeran, Planta piraña, Súper Bocina y Loco 8— son bastante divertidos, nuestros favoritos sigue siendo la concha espigada y el trueno. Y es que después de todo, Mario Kart puede entenderse como una representación de lo más actos más sin vergüenza del ser humano: Vas en décimo segundo sitio y no tienes esperanza alguna de sumar puntos; entonces recibes una concha espigada que fastidiará a ese primer lugar que está haciendo la carrera de su vida… disparas y pones fin a los sueños de copa de, quien hasta ese entonces, era tu amigo. Mario Kart 8 afianzó los vínculos entre la redacción de Paréntesis, pero también provocó rencillas entre algunos. Por fortuna, Mario Kart 8 siempre ofrece revancha.
Por otra parte, Mario Kart 8 añade nuevas experiencias a la serie, siendo la más destacada de ellas el modo Repetición. A grandes rasgos, este modo permite grabar segmentos de una carrera; puede que no suene como una gran adición, pero es sólo a través de este modo —y no en el frenesí de disputar el primer sitio con otros 11 competidores— como se puede apreciar el gran trabajo que Nintendo realizó con las animaciones de cada uno de los personajes. Literalmente, cada acción sobresaliente genera una reacción en los personajes, que en algunos resulta favorable y en otros desfavorables.
¿Increíble, no? Y aunque pudiera ser una apreciación quisquillosa, pensamos que con esta adición Nintendo —además de añadir encanto visual a su de por sí atractivo título— buscó extrapolar las mismas reacciones que realizan los jugadores al jugar Mario Kart 8.
Adicionalmente, jugar Mario Kart 8 en el Gamepad es increíblemente cómodo, aunque de inicio la idea luzca bastante descabellada. De hecho, aclaramos que buena parte de nuestra sesión de prueba la jugamos en el Gamepad, que aunque no despliega gráficos en alta definición, sí ofrece una experiencia adecuada y sobre todo, portátil. Puede que no sea el elemento más destacado del título, pero sí se siente como una característica que suma a la experiencia de juego.
Este kart tira aceite
Aunque en general Mario Kart 8 es un estupendo producto, sí detectamos un error en su diseño: El modo Batalla no cuenta con escenarios dedicados. No es un problema que modifique nuestra apreciación hacia el título, pero cuesta trabajo comprender que Nintendo no pensara en desarrollar escenarios ideados para el "combate" entre karts. Y es que al final, reñir con otros jugadores en pistas donde el objetivo es llegar a la meta carece de sentido. Con suerte, en los próximos meses Nintendo podría ofrecer escenarios diseñados especialmente para el modo Batalla como contenido descargable.
Directo al podio
Mario Kart 8 es un estupendo videojuego. Aunque Wii U ya cuenta con títulos estupendos como Super Mario 3D World, Donkey Kong Country: Tropical Freeze y The Legend of Zelda: Wind Waker HD, sin duda Mario Kart 8 es la razón para adquirir un Wii U. Su atractivo diseño de pistas y accesibilidad lo convierten en un título que, seas fanático de los videojuegos o no, te dará desde minutos hasta horas de diversión. Además, Mario Kart 8 es un fantástico recordatorio de que jugar en compañía de amigos o familiares puede ser exponencialmente divertido.