La familia Note llega a su edición más elegante 

Lo primero que llama la atención del Samsung Galaxy Note 4 es la evolución de los materiales utilizados para su construcción, y es que si bien desde el principio fue pensado para atender a un mercado Premium, éste es el primero que realmente combina la elegancia de un acabado tipo piel con bordes metálicos, cristal curvo en la pantalla y, sobre todo, manteniendo dimensiones (15.3 mm x 7.8 mm x 8.5 mm) y peso (176 gramos) amigables para su manipulación.

Personalmente el blanco y el negro me parecen los más elegantes, pero el rosa y el dorado también son una buena adición a la familia, ya que le da el toque femenino que quizás algunas mujeres buscaban en un teléfono muy relacionado con un hombre ejecutivo. 

Sus características competitivas 

El teléfono está dotado de las mejores características que puedan existir en un teléfono hoy en día, muchas de ellas han sido igualadas por otros modelos, por eso es importante reconocer que este teléfono no sólo tiene las mejores características, sino que además cuenta con un par de tecnologías que lo pueden diferenciar de la competencia. 

Entre ese listado podríamos mencionar su pantalla con resolución Quad HD (1440 x 2560 pixeles), que si bien no es el primero ni el único en tener esa calidad, durante el tiempo que estuvo en mis manos tuve la oportunidad de ponerlo frente a frente con un LG G3, un Moto Maxx, un Nexus 6 y un Oppo Find 7 y sin duda la calidad del Note 4 era sobresaliente, lo cual atribuyo a la tecnología Super AMOLED que Samsung ha implementado en sus dispositivos móviles y que sin duda alguna ofrecen colores muy saturados y que se aprecian muy bien desde varios ángulos y bajo la luz intensa del sol.  

Se lanzaron dos versiones de este teléfono, uno con procesador Exynos de 8 núcleos dividido en un Quad-Core de 1.3 GHz y otro Quad-Core de 1.9 GHz, mientras que la segunda versión tiene un Snapdragon 805 Quad-Core de 2.7 GHz, ambos con 3 GB de RAM. En este caso la versión que nos compete en México es la Exynos, que es la que se distribuye de forma comercial y como bien puedes imaginar, la velocidad de respuesta no presenta ninguna falla. Si bien la familia Note tiene un software muy pesado y demandante, Samsung ha hecho un buen trabajo con sus procesadores, por lo cual se pueden utilizar varias apps en una misma pantalla, pasar de una app a otra en cuestión de segundos, jugar, editar, trabajar, etc., y todo sin retrasos o saltos en el sistema. 

Por todo lo dicho anteriormente al principio supuse que la duración de la batería no iba a estar a la altura de otros celulares Premium. La realidad fue grata, su batería de 3,220 mAh funciona muy bien en condiciones demandantes, por supuesto que lo que más drena energía es la utilización de la pantalla en modo de video y juegos, sin embargo para las emergencias es posible utilizar un ultra modo de energía que puede convertir 10% de batería en 2 horas de comunicación a través de llamadas y mensajes. Por otro lado la carga rápida de la batería sí funcionó pues en menos de 10 minutos el teléfono alcanzaba un 30%, algo que no se veía en los teléfonos anteriores, sólo toma en cuenta que para ello es 100% necesario utilizar el cargador de fábrica, si utilizas uno de otro teléfono el modo de carga rápida no funciona. 

El almacenamiento de 32 GB podría parecer insuficiente para todas las cosas que se pueden almacenar en el teléfono, así como para las fotos y videos que se pueden capturar con éste, sin embargo la ranura microSD tiene capacidad para soportar hasta 128 GB extras, algo que lo pone en una tremenda ventaja frente a su principal rival, el iPhone 6 Plus, pues por mucho menos dinero Samsung ofrece mayor almacenamiento frente a los 16 mil pesos de un iPhone 6 Plus de 128 GB. 

Los sensores también son una novedad en la familia Note, pues ahora también puede ser un compañero de deportes gracias a su sensor se ritmo cardiaco que se sincroniza con la app S Health, aunque para ser muy sinceros, el Note no es un teléfono que yo me llevaría para monitorear mi actividad física, en todo caso optaría por un Galaxy Alpha que tiene el mismo sensor y es mucho más liviano y portátil. El otro sensor que sí es muy bien aprovechado es el de huellas dactilares gracias a que permite desbloquear el teléfono en un sólo movimiento, algo que en una pantalla tan grande como ésta resulta un gran alivio. 

Tampoco es el único teléfono que cuenta con una stylus, pero Samsung se puede jactar de tener la mejor, por lo menos cuando hablamos de smartphones. Su S Pen me dejó muy contento desde la segunda generación de Note por los diferentes puntos de presión que puede registrar y que año con año es mejorada tanto en rapidez al trazar, como por la integración que tiene con su sistema operativo, y no hablo de Android 4.4, sino de la interfaz de usuario hecha por Samsung para utilizar herramientas de edición y creación de bocetos, notas y organización. Algunas de estas herramientas son Smart Select, Photo Note y todas las incluidas en Air Command. 

¿Qué tal sus fotos y videos? 

Un teléfono tan competitivo no podría dejar el aspecto de la cámara a la deriva, por eso fue mejorado el sensor de esta cuarta generación; ahora tenemos una cámara principal de 16 megapixeles con tecnología Smart OIS capaz de grabar video UHD y una cámara frontal de 3.7 megapixeles con apertura F1.9 y un ángulo de visión mucho más amplio que el de otros teléfonos. 

Lo único malo de la cámara es que sus opciones de disparo son limitadas, no tiene una plataforma muy original en cuestión de cámara, pero por todo lo demás los resultados son muy presumibles. A ambas cámaras ahora les entra más luz, por lo cual los autorretratos en interiores o fotos de paisajes de noche se ven con más vida y poco ruido. En una de las comparaciones hice un Galaxy Note 4 vs. iPhone 6 en condiciones de poca luz y a reserva de lo que otras personas esperen de una fotografía, las fotos del Note 4 salieron mucho mejor iluminadas, mientras que las del iPhone 6 salieron con un balance de color mucho más real y con menos ruido. 

En cuestión de selfies, Samsung aprendió de la experiencia de la selfie de Ellen DeGeneres e integró un modo de selfie panorámico (120º) para que en las fotos grupales nunca se quede alguien fuera, o bien, en un viaje, puedas retratarte con un fondo mucho más amplio y no salga sólo tu cara. 

Las conclusiones del Note 4 

Es un teléfono al que difícilmente uno le puede encontrar errores, más allá de que algunas personas no terminan de ver con buenos ojos la categoría de los phablets. La realidad es que el único detalle lamentable que le encontré a este teléfono es el hecho de que a pesar de que integra Gorilla Glass 4, las leves ralladuras en el cristal comenzaron a hacerse presentes. Y definitivamente puedo dejar constancia que el teléfono nunca lo tuve bajo un uso rudo, dado que no es el tipo de teléfonos que uno prueba como si fueran todo terreno, es por eso que el roce con las llaves, monedas o cualquier otro objeto en la bolsa de un pantalón no debería ser causante de este tipo de lesiones. Otros usuarios de Note 4 me han comentado que no se han enfrentado a este tipo de problemas, quizás mi experiencia tiene una explicación específica, pero sea cual sea el caso es algo que no debería suceder, sobre todo después de que Corning Gorilla Glass prometió la generación más resistente de cristales. 

El teléfono tampoco tiene certificación IP, ni tiene el sistema operativo más reciente de Andorid (hasta ahora, porque sí se espera la actualización a Lollipop), pero poniendo en una balanza toda la tecnología que promete y cumple este teléfono para mi es fácil catalogarlo como el teléfono más completo del 2014. No me gusta utilizar el término “mejor”, ya que es un título que responde a diferentes necesidades de diferentes usuarios, pero sí es un hecho que el Samsung Galaxy Note 4 es una máquina móvil para cualquier usuario que busca lo mejor en tecnología. 

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