- Diseño espectacular
- Motor, potencia y desempeño
- Buenos materiales al interior
- Menú SRT con páginas de rendimiento y configuración del auto
- Experiencia de manejo
- No tiene sensores de proximidad delanteros
- El consumo de gasolina es alto (pero en este coche, ¿a quién le importa?
- Los asientos dejan muy suelto al conductor
Entre Parentesis
¿Quieres un "Muscle Car"? El Dodge Challenger SRT Hellcat es uno de los más potentes disponibles en el mercado y ofrece una gran experiencia de manejo, un muy buen nivel de tecnología y un rugido que hará que nunca pases desapercibido. ¡Es un monstruo!
Sí, sabemos que, probablemente, nadie leerá esto cuando un poco más arriba tenemos un video de 15 minutos sobre este bestial auto, sin embargo, en este texto te ofrecemos algunos detalles adicionales sobre el Challenger SRT Hellcat.
Diseño de leyenda
Muchos lo aman y otros tantos lo odian. Lo que sí es seguro es que el diseño del Challenger es único y llama la atención, pues cuenta con elementos retro tomados de los modelos clásicos del auto que se combinan muy bien con elementos que cualquier coche moderno debe tener, como las luces de día en LED.
Específicamente, la edición SRT Hellcat tiene algunos distintivos, como un alerón trasero y rines de 20 pulgadas, ambos en tono negro mate que contrasta bien con el color verde del coche, así como frenos Brembo de alto desempeño, diferentes tomas de aire en el cofre y faldón delantero, un difusor de aire al frente y el logotipo del gato endiablado en los costados.
Del interior me gustaría destacar que también existe esta comunión entre lo retro y lo moderno. La parte clásica puede verse en detalles como la forma de las manijas para abrir las puertas o la palanca de velocidades, mientras que las modernas abudan en el tablero, con una gran pantalla táctil para el sistema de infoentretenimiento, un diseño minimalista e insertos en fibra de carbono.
En general, el espacio interior es bueno, pues aunque es un coupé, es un auto largo. Claro, como en todos los coches de este tipo, entrar y salir a los asientos traseros es una tarea hasta cierto punto complicada. De igual forma, Dodge mejoró mucho en los materiales dentro del Challenger, que en esta edición están forrados en piel y pueden calentarse o enfriarse.
Realmente es adictivo manejar este tipo de coches, pues enamoran todos los sentidos, desde el olfato y el tacto, con la piel y los materiales al interior; la vista, con el diseño, y el oído, con el rugido que sale de los dos escapes del Challenger. Fue una relación fugaz, sí, y no me gustó que se terminara, pero de haber continuado mi economía se habría visto sumamente mermada y las ganancias de la gasolinera que está camino a la redacción de Paréntesis habrían aumentado considerablemente.
Como auto de carreras
Dentro del Challenger SRT Hellcat tenemos una gran pantalla táctil con el sistema de infoentretenimiento UConnect, que hemos visto en modelos como la Journey R/T, que te deja enlazar tu teléfono vía Bluetooth, enviar y recibir mensajes, esuchar apps como Spotify y acceder a navegación guiada por voz, sin embargo, cuenta con un menú exlcusivo SRT que te permite configurar todos los aspectos del desempeño de este Challenger, como la potencia del motor, la transmisión, activar las paletas de cambios detrás del volante, el sistema de tracción y la suspensión del auto.
También hay un apartado que pemrite ver de forma muy gráfica como se desarrollan los caballos de fuerza del motor, el torque y la presión del supercarcador del motor. También puedes ver instrumentos digitales de alto desempeño, como la temperatura del aceite y el refrigerante, la tensión de la batería y la temperatura de la transmisión. Sin duda, ésta es una adición al sistema Uconnect para este auto.
Rugido que apasiona
Como lo dije arriba, manejar un Challenger SRT Hellcat es completa y absolutamente adictiva —pero dañino para mi economía. Bajo el cofre hay un motor supercargado de ocho cilindros, 6.2 litros y 707 caballos de fuerza... ya se imaginarán cómo se siente estar tras el volante (y también como consume combustible, pues puede llegar a consumir más de cinco litros de gasolina en un minuto... ¡pum!).
Gracias a este motor, no importa que estemos hablando de un auto grande y pesado, pues desarrolla una potencia suficiente para arrancar rápido y tener una excelente recuperación, adrenalina incluida gracias al inmejorable sonido que sale de sus dos escapes.
El motor está acoplado a una caja automática de ocho velocidades con modo manual, lo cuál ayuda con el consumo de combustible
Algo que me gustó mucho es que sí se percibe un cambio real con los diferentes ajustes que puedes hacer con el auto. Entonces, depende de qué ti cómo lo quieras manejar: con la suspensión y dirección más rígida, para un comportamiento más deportivo, o con la dirección y suspensión más suaves para ir mucho más cómodo.
Un detalle interesante es que este auto tiene dos llaves, una roja y una negra. Si enciendes el auto con la primera obtendrás los 707 caballos de fuerza, y si lo haces con la negra sólo te entregará 500, por si no estás con ánimos de correr. Llama la atención que este cambio también se puede hacer a través de la pantalla en el menú SRT.
Esta fue la reseña del Dodge Challenger SRT Hellcat... ¡un merecido aplauso si llegaste hasta este punto de la reseña!