Roku –que en japonés significa “seis” por ser la sexta compañía de su creador–, es un reproductor de medios que en pocas palabras puede ser explicado como un aparatito que convierte tu televisión tradicional, aburrida y sin Internet en una Smart TV, es pequeño así que te cabe en la palma de la mano y pesa apenas 85 gramos. Pero esto es tan sólo la introducción para despertar tu interés de seguir leyendo si considero que la experiencia que ofrece es buena y si vale la pena gastar tu dinero en él, ahora vamos a los detalles. 

¿Qué hay que saber de Roku?

 

Este aparatito no es nuevo, lleva ya en el mercado varios años pero hace unas semanas debutó en México y lo hizo con tres versiones diferentes de su producto: Roku Stream Stick (1,099 pesos), Roku 1 (1,099 pesos) y Roku 2 (1,549 pesos). En esta reseña me voy a enfocar en Roku 2, muy a grandes rasgos ofrecen lo mismo pero al momento de decidir comprar uno, es importante que sepas cuál es el que mejor se ajusta a tu tipo de uso.

 

El Roku 1 y el 2 parecen el mismo producto pero el 2 es más reciente, también casi $500 pesos más caro pero a cambio ofrece un procesador más veloz que sí se nota sobre todo al agregar nuevos canales a tu perfil. Con esto me refiero a que como en todas las plataformas tienes un perfil donde agregas tu contenido favorito, y cada que añades un nuevo elemento éste se tiene que descargar. Considerando una misma conexión, Roku 1 puede hacer este proceso en un minuto mientras que Roku 2 puede hacerlo en 10 segundos. 

 

La segunda diferencia importante de Roku 2 es que es el único que tiene ranura para microSD y puerto USB, por si quieres reproducir videos, canciones o fotos que tengas en estos dispositivos de almacenamiento. Es el más completo de todos, al ser el único con puerto para Ethernet, en caso de que la señal de tu Wi-Fi no llegue tan bien a donde está la tele, las dos conexiones antes mencionadas y además el puerto HDMI. Lo malo: el cable HDMI no viene incluido en la caja así que tendrás que conseguir uno, afortunadamente a estas alturas no es tan difícil y no son tan caros (consigues uno hasta por $70 pesos). 

 

La instalación: pan comido 

 

 

Ponerlo a funcionar es un proceso en verdad cero complicado, lo conectas a una corriente eléctrica –cabe destacar que debe estar todo el tiempo conectado para poder funcionar–, lo conectas a la red, ya sea Wi-Fi o Ethernet, y luego lo conectas a la tele a través de HDMI. Hecho esto sólo hay que esperar a que el sistema se actualice y listo, empieza la verdadera diversión. El único problema que le encuentro a esto con todo y su sencillez es que el menú inicial está en inglés, así que si llega a caer en manos de alguien que no sepa el idioma, podría tener problemas para usarlo.

 

¿Cómo es que hace inteligente a una televisión? 

 

En el primer menú tienes los canales que has elegido como favoritos, en la segunda sección el catálogo de todos los canales divididos por categoría y al final, todo lo que tiene que ver con opciones de configuración. 

 

Roku ofrece acceso a 1,500 canales, ellos le llaman canales debido a que el concepto de Roku es ofrecer una experiencia similar a la televisión, a diferencia de Chromecast que está más enfocado a ser una extensión de tu celular añadiendo herramientas extras. Pero en un lenguaje más terrenal es lo mismo que nosotros conocemos por aplicaciones. Esto incluye desde las más populares como YouTube, Netflix, Spotify, Cinépolis Click, Facebook, Google Play Películas, etc, hasta canales más especializados de diferentes categorías como música, programas para niños, comida, estilo de vida etc. Para que me entiendan mejor, pueden encontrar canales para aprender idiomas, para cantar karaoke, videos especializados en bromas, juegos, ver series, ver las noticias, las posibilidades son muy amplias.

 

El lado no tan dulce  

 

 

No todo es miel sobre hojuelas, primero porque es una realidad que no todos los canales valen la pena, me encontré unos muy aburridos y otros con una interfaz de usuario muy fea que ni ganas daban de seguir navegando, esto no es culpa directamente de Roku, pero finalmente es el tipo de contenido que ellos han seleccionado como parte de su catálogo.

Hay canales que no están actualizados, Spotify por ejemplo es una de las más populares y me sorprende que siga con la interfaz de hace mucho tiempo. 

 

Afortunadamente la posibilidad de que entre 1,500 canales encuentres varios canales favoritos es muy alta, además de que si somos muy honestos, la mayoría de los que tenemos Smart TV sabemos que al final siempre terminamos utilizando las mismas 3 o 5 aplicaciones según nuestra personalidad. 

 

También hay que aclarar que no todas las apps son gratis, varias funcionan al estilo de Netflix: puedes descargarlas a tu aparato pero si quieres ver su contenido debes pagar una suscripción o una renta por película, ahí ya es tu decisión. 

 

Esta es una duda muy común, así que lo voy a dejar bien claro, Roku no cobra por ver paquetes de canales, ni videos, ni juegos, ni nada; Roku te vende el aparato y lo que tengas que pagar después dependerá de los servicios a los que te quieras suscribir. Tampoco hay que pasar por alto que puedes transmitir inalámbricamente el contenido multimedia del celular a la pantalla.  

 

Con Roku, tienes el control, literal

 

 

Una de las diferencias frente a Chromecast, uno de sus rivales, es que Roku viene con un pequeño control en sus tres versiones. Quizás algunas personas no piensen igual pero a algunas les parece más cómodo tener un control tradicional de televisión porque les brinda la experiencia clásica de sentarse a relajarse un rato. 

 

Para los más modernos, Roku tiene una app para iOS, Android o Windows Phone, así controlas toda la plataforma desde el celular. Yo soy de los que sí prefieren usarlo desde la app. por aquello de que cuando quieres hacer búsquedas o tienes que meter tu correo es más fácil escribir con el teclado del celular que con el control.  

 

En cuestión de personalización se puede elegir entre un par de temas, los colores y diseño de tu perfil, por aquello de que la interfaz morada predeterminada podría no ser del agrado de todos. Adicionalmente, puedes escoger el formato 720p o 1080p según el modelo de tu pantalla. 

 

Entonces, ¿gusta o no gusta?

 

Roku representa una muy buena opción para ampliar el entretenimiento en casa, es verdad que primero se la recomendaría a alguien que no tiene una televisión inteligente pero eso no quiere decir que alguien con una Smart TV no podría usarlo con provecho pues los canales que ofrece Roku pueden ser exclusivos.

 

Es cierto que tiene una sección de juegos, pero no lo utilizaría como argumento para que alguien se lo comprara pues los juegos que tiene son demasiado sencillos o complicados de jugar por la interacción con el control. En realidad Roku se disfruta más cuando quieres ver una película, curiosear videos en internet o si eres de los que le gusta transmitir el contenido del celular a la pantalla de la casa para que todos vean. 

 

Para los que no sepan, no es la única opción de este tipo en el mercado pero es bueno tener una opción más sobre todo porque Roku sí tiene una personalidad distinta a la de Chromecast y Apple TV. Haciendo un consenso con mis propios amigos y conocidos en redes sociales descubrí que hay gente que dice que lo que les gusta de Roku es que no necesitan prender un tercer dispositivo (teléfono/tablet) para poder empezar a disfrutar del contenido, lo cual es igualmente válido. 

 

No le diría a una persona que no se lo recomiendo porque creo que tiene potencial, sin embargo, es verdad que primero les sugeriría echarle un ojo a Chromecast o Apple TV de tercera generación (que es el que compite por precio – 1,249 pesos) para que estén perfectamente convencidos de que la interfaz y el contenido de Roku es lo que están buscando. 

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