A todos nos encanta viajar en auto, no obstante, cada persona tiene una razón específica por la cual lo usa. Ya consideraste los gastos de la compra venta, pero de seguro no has contemplado todo lo que tendrás que hacer antes y después de tenerlo en la puerta de tu casa.
Lo que debes considerar es:
1. Seguro
Esto aplica para coches usados o nuevos, es un costo que debes cubrir si quieres estar protegido o si quieres evitar un problema enorme. Para lo primero lo mejor es un seguro de cobertura amplia, que cubra robo, gastos médicos, daños a tu vehículo y a terceros, grúa, etc. Lo segundo aplica si andas corto de dinero y no te alcanza, al menos contrata un seguro de responsabilidad civil a terceros; éste te cubre si llegas a pegarle a algún auto, aunque no te cubre tu coche, pero al menos te evitarás muchos conflictos tanto legales como con la policía.
2. Verificación
A menos que adquieras un coche híbrido o eléctrico, no tendrás que preocuparte de verificar tu auto. La verificación es algo que debes hacer cada seis si tu auto es usado o cada dos años durante los primeros cuatro años si tu auto es nuevo. En el caso de un coche usado, si tu auto no está en buenas condiciones, puede ser un dolor de cabeza, pues no pasará la prueba. El costo varía dependiendo de la entidad en la que vivas.
3. Mantenimiento
En el caso de los coches nuevos debes realizar los servicios de mantenimiento que te indica el fabricante, esto alargará la vida de tu auto al mismo tiempo que te ayudará a mantener la garantía. En el caso de un coche usado, esto es de mucho cuidado, acércate con tu mecánico de confianza y que revise bien el coche usado que vas adquirir. Que sea específico en decirte qué le hace falta, que te diga el costo que tendrás que cubrir, para que el coche al final ande en óptimas condiciones y no te deje varado.
4. Impuestos
Al adquirir un auto nuevo tendrás que pagar el IVA correspondiente y otro creado específico por comprar un auto nuevo, se llama el ISAN (Impuesto Sobre Automóviles Nuevos). El IVA corresponde al 16% del valor del auto y el ISAN (va del 5% hasta el 17% según el valor del auto).
5. Trámites vehiculares
Este punto va relacionado al anterior, para que tu auto nuevo o usado pueda circular necesita tener un permiso o placas con engomado, así como cumplir con el pago del impuesto denominado como Tenencia (que para efectos prácticos es un pago que das al gobierno por tener derecho a un coche, sí, aunque suene ridículo). El permiso o placas, así como la tenencia tienen un costo diferente en cada entidad y se tramita ante las oficinas de gobierno respectivas.
En el caso de la tenencia en algunas entidades está subsidiado, es decir, no se paga si el valor del auto no sobrepasa cierto precio o si el vehículo es híbrido o eléctrico.
Por otro lado, si compras un auto usado debes pagar el impuesto por compra de un auto, así como el impuesto de cambio de propietario. El porcentaje de pago también depende de cada entidad y te lo integrarán en el costo cuando vayas a tramitar las placas como engomado.
6. El desembolso
Si compras un auto usado al contado o das un enganche para comprar un auto crédito. El desembolso de dinero es fuerte, te costará mucho trabajo juntarlo, por lo que ten paciencia y date tiempo para acumular el dinero.
En el caso de la compra de un usado el desembolso es muy grande, para crédito no tanto pues hoy en día existen enganches desde el 10% en adelante.
7. El crédito, los intereses
Este rubro va relacionado a lo anterior, si vas a comprar un auto a crédito y ya tienes para el enganche, checa todas las opciones de crédito que te ofrecen o buscan unas bancarias de tu parte. Revisa la que más te convenga, con menor interés y la que te dé mayores facilidades. Recuerda que el compromiso a pagar no es para unos meses sino para varios años.
8. Si está libre de robo
Esto aplica sólo para autos usados, checa en el REPUVE si el auto tiene o tuvo reporte de robo. Si lo tiene no te metas en problemas, si lo tuvo, pero fue recuperado, el vendedor te debe entregar el acta de recuperación con el sello de la autoridad, es imprescindible que tengas este documento. Es tan importante como la factura del coche.
9. Gasto de combustible
Es cierto que el auto te llevará a donde quieras, pero para que se mueva necesita combustible. Aunque suene tonto, debes considerar el gasto de gasolina o diésel que incluye tener un auto, esto dependerá cuánto lo uses a diario o si sales mucho a carretera. Si quieres que te dé buen consumo busca un auto rendidor o un híbrido, si esto no te importa al menos considera el volumen de gasto mensual que piensas asignar, así no te llevarás sorpresas en tu presupuesto.
10. Lo adicional, opcional
Ya sea si compras un coche usado o nuevo, nuestra recomendación es que guardes un dinero, ya sea para un trámite adicional a lo antes mencionado, porque tengas que gastar en algún desperfecto mecánico en el caso de un coche usado o porque quieras modificar tu auto, ya sea con un estéreo, alerón, rines, etc.
Siempre será bueno tener un dinero para emergencias por si hay que pagar remplacamiento, impuestos o alguna multa que puedas generar por estacionarte mal, siempre pasa algo cuando no hay recursos para solventarlos.