El confinamiento por la pandemia trajo como consecuencia un aumento en las cifras de desempleo, debido al cierre de negocios y a que muchas empresas se vieron en la necesidad de reducir su personal para seguir operando.
Ante este panorama, un gran número de personas se han visto en la necesidad de buscar nuevas oportunidades laborales, lo cual, dadas las circunstancias, no ha sido tarea fácil. Y, como siempre suele pasar, los delincuentes aprovechan este tipo de situaciones para lanzar ganchos y hacer caer a las personas en fraudes y estafas.
En este caso, ese gancho consiste en publicar ofertas de empleo muy atractivas, en las que con poco esfuerzo, horarios flexibles e incluso trabajando desde casa, puedes ganar un muy buen sueldo.
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Estas ofertas se suelen publicar en redes sociales, sobre todo en Facebook. Una vez que las personas interesadas se ponen en contacto, las citan para una entrevista presencial, a la que se les pide llevar determinada cantidad de dinero, o incluso realizar un depósito o transferencia, con el pretexto de que es para pagar algún curso de capacitación, el uniforme o algún material necesario para el trabajo.
Al respecto, los expertos en reclutamiento de personal aseguran que ninguna empresa debe pedir dinero a sus candidatos como condición para contratarlos, pues todos los procesos de selección son gratuitos.
Además, la misma empresa es la encargada de proporcionar al empleado todo lo necesario para cumplir con su trabajo, incluyendo materiales y uniformes, por lo que no se les debe pedir dinero para ello.
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Por lo tanto, si en alguna oferta laboral te piden dinero, por la razón que sea, esa es ya una clara señal para desconfiar, pues seguramente se trata de una estafa.
Además de esto, hay otras señales que indican que una oferta de empleo es falsa y puede conducirte a ser víctima de un fraude:
- Ofrecen sueldos demasiado altos para ser verdad, según el tipo de trabajo del que se trata.
- Usan ganchos como que puedes ser tu propio jefe, tener horarios flexibles, trabajar desde casa o ganar mucho en poco tiempo y con poco esfuerzo.
- Cuando la supuesta empresa que ofrece el empleo no usa un correo institucional para contactarte, sino uno personal de servicios como Gmail, Outlook, Hotmail, etcétera.
- Te llaman o te piden que llames a números móviles, pues no proporcionan el número de un teléfono fijo.
- Te piden llevar dinero a la entrevista o realizar alguna transferencia o depósito por adelantado, prometiendo que el empleo ya es tuyo.
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Toma en cuenta estos puntos al evaluar una posible oferta de empleo; además, procura investigar a la empresa que lo ofrece, busca referencias y opiniones para ver si es algo real, y solicita a la persona que te contacte que aclare todas las dudas que puedas tener.
Finalmente, si te topas con una oferta de empleo falsa, puedes denunciarla ante la Procuraduría Federal de la Defensa del Trabajo (PROFEDET) y la Policía Cibernética.
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