El rediseño que Apple realizaría al iPhone 8, que presuntamente contaría con una pantalla sin biseles, provocaría que Apple sustituyera su sensor de huellas digitales Touch ID por un escáner biométrico parecido al que Samsung utilizó en el Galaxy Note 7.
Al menos así lo cree el analista de JPMOrgan Rod Hall, quien según el portal MacRumors, señaló que el iPhone con pantalla de 5.8 pulgadas tendría un nuevo método de seguridad debido al retiro del botón de Inicio en favor de un escáner de iris. También sugirió que los dos iPhone adicionales que Apple presentaría en septiembre contarían con esta misma tecnología.
Varios reportes sugieren que Apple celebrará el décimo aniversario del iPhone con un celular sumamente renovado. Asimismo, presentaría dos modelos mejorados respecto de la generación actual que llevarían el nombre de iPhone 7s y 7s Plus.
Hall basa sus afirmaciones en una orden de pedido de escáneres de iris realizada por Apple, que sugiere que la compañía integraría esta tecnología en sus celulares de nueva generación. Según el analista, esta inclusión también favorecería la adopción del sistema de pagos electrónicos Apple Pay, que Apple impulsará con mayor fuerza en los próximos meses.
Ayer, el analista Ming-Chi Kuo de KGI Securities anticipó que uno de los iPhone que Apple presentará en septiembre próximo contaría con una “barra virtual de funciones” sobre la que Apple podría adaptar un nuevo botón de Inicio, así como un menú de accesos rápidos parecido al Touch Bar de la nueva MacBook Pro.
Se rumora que los iPhones de próxima generación podrían elevar su precio por encima de los 1,000 dólares.
Nota relacionada: Apple y Samsung van juntos por el iPhone 8
