Samsung no tiene una consola de videojuegos. Pero durante IFA 2013, que se lleva a cabo en Berlín, mostraron lo que ellos llaman una consola portátil.
Se trata de un control remoto para jugar de forma mucho más cómoda los títulos que tienes en tu smartphone. Este gadget se enlaza al teléfono mediante Bluetooth y tiene tres pads y cuatro botones para controlar todo lo que se pueda en el juego. Además, cuenta con un soporte en el que podrás colocar tu celular para entretenerte en donde quieras o puedes conectar el smartphone a la televisión por medio de HDMI y así jugar más como si se tratara de una consola real.
En su booth, Samsung demostró las capacidades de este control con el juego Need for Speed, que corría en un Galaxy Note 3.