Mañana el Vaticano desactivará la señal de teléfonos móviles antes de elegir al nuevo papa, con la finalidad de mantener la seguridad al tope y la elección se lleve a cabo en plena privacidad y en secreto.
Según la agencia de noticias italiana ANSA, se planea restringir la señal antes de iniciar el cónclave, con inhibidores de señal alrededor de la Capilla Sixtina para mantener lejos la vigilancia electrónica y comunicación. Durante la reunión 133 cardinales votarán para elegir al sucesor del papa Francisco y liderar a los 1.400 millones de católicos del mundo.
La radiodifusora estatal italiana RAI, informó que la señal se cortará a las 3:00 p.m. (hora local) de mañana miércoles, esto sucederá hora y media antes del inicio del cónclave y los cardenales comenzarán a dirigirse a la Capilla Sixtina durante este periodo. También el Vaticano confirmó que los 133 cardinales que participarán en la votación ya se encuentran en Roma.
La alta seguridad de este evento se encuentra inmerso en el nombre: la palabra <cónclave> proviene del latín, que significa literalmente “con llave” o “cerrado con llave”. Se le llama así porque históricamente los cardenales que eligen al nuevo papa se quedan encerrados bajo llave para evitar influencias externas y presiones políticas durante el proceso de elección.
Pero esta práctica tiene un origen entre 1268 y 1271 en Viterbo, cuando los cardenales estuvieron indecisos durante 33 meses para elegir al papa, y estaban en medio de profundas divisiones y tensiones. La demora y el desgaste fue tanto que, las autoridades legales decidieron encerrar a los cardenales, para forzarlos a tomar una decisión. En 1274 el papa Gregorio X promulgó en 1274 la “bula Ubi periculum”, en donde formalmente los cardenales debían estar encerrados bajo llave hasta elegir al nuevo pontífice.
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Una medida extrema para acelerar el proceso de elección, es que en caso de prolongación las porciones de comida se van reduciendo conforme pasan los días. Esta regla se utiliza como mecanismo límite para acelerar la decisión.
El inicio de los bloqueadores de señal
Se tiene registro de que esta medida inició en 2013, en donde se utilizó una jaula de Faraday. Actualmente, se ha perfeccionado con tecnologías adicionales como sistemas anti-drones, cámaras de vigilancia con Inteligencia Artificial para detectar anomalías, y además, agregan películas opacas en las ventanas para impedir imágenes desde el exterior. Las cámaras y sensores que intentan acceder al perímetro se bloquean automáticamente a través de barridos ambientales que logran detectar la señal.
No hay fecha exacta que determine cuándo se tendrán los resultados de esta elección, pues puede tomar varios días, no obstante, hay un promedio de 3 días, ya que la mayoría de cónclaves actuales se han desarrollado en este periodo de tiempo. Los cardenales se encontrarán en aislamiento durante este periodo, sin poder enviar mensajes al exterior, es decir, prácticamente estarán incomunicados hasta con su familia.
La Plaza de San Pedro sin problema
La Plaza de San Pedro no estará afectada por los bloqueos de señal, esta se mantendrá abierta y permitirá el acceso a quienes deseen esperar el anuncio y presenciar las tradiciones. Sin embargo, la seguridad se ha reforzado y se pondrán puestos de control en las entradas, colocando detectores de metales y sistemas de anti-drones.
La seguridad extrema en el Vaticano durante el cónclave se debe a la necesidad de garantizar el secreto absoluto y la integridad del proceso de elección del nuevo papa, para evitar cualquier tipo de interferencia, filtración o presión externa. Estas medidas responden al aislamiento físico, que es requerido para llevar a cabo el proceso. El Vaticano se convertirá en una especie de “búnker digital” en los próximos días.
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