Taylor Swift anunció su apoyo a Kamala Harris en las próximas elecciones presidenciales. Sin embargo, lo que motivó a la estrella del pop a expresar su posición política de manera tan clara fue la creciente preocupación por el mal uso de la inteligencia artificial (IA), tras la aparición de imágenes falsamente generadas que la mostraban respaldando a Donald Trump.
En una publicación de Instagram, Swift reveló que se enteró de que imágenes generadas por IA, que la hacían parecer partidaria de Trump, fueron compartidas en Truth Social, la red social del expresidente. Una de estas imágenes mostraba a Swift en un póster al estilo “Uncle Sam”, con el texto: “Taylor wants YOU to vote for Donald Trump”. Para Swift, este fue el detonante que la llevó a ser transparente sobre sus intenciones políticas, afirmando que “la forma más efectiva de combatir la desinformación es con la verdad”.
La manipulación de imágenes y videos mediante inteligencia artificial se ha convertido en una preocupación creciente a medida que las herramientas generativas son más accesibles. El caso de Taylor Swift es solo un ejemplo del peligro que representa el uso no regulado de esta tecnología en un contexto tan delicado como las elecciones. Swift expresó su inquietud por cómo la IA puede distorsionar la realidad, diciendo que “conjura mis miedos sobre la IA y los peligros de la desinformación”.
Este incidente no es el primero relacionado con el uso de IA para manipular la imagen de Swift. A principios de año, se compartieron imágenes no consensuadas de ella en redes sociales, generadas también con inteligencia artificial. Estos hechos solo subrayan la importancia de establecer regulaciones que limiten el uso de IA para fines maliciosos.
Luego de este incidente, Swift hizo explícito su respaldo a Kamala Harris. En su declaración, Swift mencionó los derechos LGBTQ+, la atención reproductiva y la fertilización in vitro (IVF) como temas clave que influyeron en su apoyo a la vicepresidenta. También alentó a sus seguidores a registrarse para votar, aprovechando su influencia en redes sociales para motivar la participación electoral.
El uso de inteligencia artificial y su potencial para alterar la percepción pública es una preocupación real en esta era digital. Para Taylor Swift, este caso resalta la urgencia de garantizar que las herramientas tecnológicas no se utilicen para propagar información errónea que pueda afectar decisiones cruciales, como las que enfrentan los votantes en las próximas elecciones.
EL POSTEO DE SWIFT
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