A diferencia de otras celebridades, Mark Zuckerberg dio una declaración sobria acerca del triunfo de Trump. La cabeza de Facebook dijo que había que concentrarse en cómo curar enfermedades y aumentar las oportunidades de educación.
Sobre las posibles consecuencias inmediatas del resultado de la contienda estadounidense electoral, no dijo nada.
“Pienso en el trabajo que debemos hacer para crear el mundo que deseamos para nuestros hijos. Este trabajo es más grande que cualquier presidencia y el progreso no se mueve en línea recta”, escribió en
.
Zuckerberg anteriormente había declarado, en una clara crítica a Trump, que ningún muro le impediría seguir su labor.
Por su parte, Tim Cook, consejero delegado de Apple, afirmó que después de las elecciones, lo único que queda por hacer es seguir adelante, juntos.
Cook reconoció que dada la pronunciada diferencia ideológica entre Trump y Clinton, es inevitable que las personas se queden con sentimientos fuertes después de los resultados.
“No importa a quién hayamos apoyado, lo importante es seguir adelante”, declaró Cook a través de una carta, en la que también defendió la diversidad de opinión en Apple.
Su pronunciamiento resultó tibio para algunos medios, dado que durante la campaña, Trump llamó a boicotear Apple por no fabricar todos sus productos en Estados Unidos.
Con 49% de los republicanos que dice temer a los demócratas y 55% de los demócratas que afirma lo propio sobre los republicanos, los ánimos en Estados Unidos no podrían estar más divididos.
Otros personajes de Silicon Valley no reaccionaron de manera similar. El inversor de Airbnb y Uber, Shervin Pishevar, dijo que a raíz de los resultados, desea que California se separe de Estados Unidos y se vuelva una nación independiente.
Nota relacionada: En las elecciones de Estados Unidos, 75 millones de tuits