Twitter suspendió el acceso a 31 cuentas que de manera crónica archivaban tuits borrados por políticos, diplomáticos y embajadas alrededor del mundo, informó la Open State Foundation (una traducción cercana sería Fundación del Estado Transparente), un organismo que vigila la presencia de servidores públicos en Twitter y que auspicia la plataforma Politwoops.
La decisión ha sido defendida por Twitter, aseverando que “ningún usuario merece más este derecho que otro”, en clara alusión a la libertad del emisor del mensaje a replanteárselo, y si fuera el caso, borrarlo. Pero Arjan El Fassed, directivo de la Open State Foundation, recuerda que todo empleado gubernamental está sujeto a escrutiño público. “Lo que los políticos electos dicen en público es asunto público. Incluso cuando sus tuits han sido borrados, es parte de la historia parlamentaria”, aseveró. “Estos tuits alguna vez fueron publicados y posteriormente borrados.”