Es muy común confundir por gastos de transferencia de auto, en la hora de vender o comprar un carro, ya que ambas partes le interesa que los documentos oficiales del vehículo estén en regla, por eso aquí te presento una guía de los trámites que debes realizar correctamente.
Cómo hacer transferencia automotor
Una vez que el acuerdo de compra-venta haya sido efectuado, el comprador deberá acudir al Registro del Automotor de su circunscripción para completar el respectivo formulario 08 a su nombre. En este momento deberá abonar el 1% más las cargas y sellos que solicite el Registro. El costo de la transferencia del automotor se incrementa cada año, tomando una actualización aproximada del 20%. Estos datos siempre varían según la fluctuación de los precios a nivel país.
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Cuando ya se hayan realizado dichos trámites, para concretar la transferencia es necesario coordinar acciones entre los involucrados, y es obligación del vendedor entregar al comprador la documentación que se detalla a continuación: Título de propiedad; Libre deuda de infracciones de tránsito; Informe de patentes municipales; Verificación policial (preferentemente realizada en la zona de compra del vehículo), Formulario 381 (de AFIP); Formulario 08 firmado y certificado por el encargado del Registro Automotor, o ante escribano público nacional; Informe de dominio solicitado en el Registro del Automotor donde está radicado el vehículo.
Entonces, ¿quién paga los gastos de transferencia de un auto? Existen acuerdos entre las partes involucradas, donde se negocia algún tipo de descuento en el precio final del vehículo a cambio de que el comprador pague las deudas que tiene el automotor en materia impositiva. En el sentido estricto de la palabra, estos no son gastos de transferencia, pero efectivamente forman parte de un costo que debe asumir quien toma el dominio de un automotor. Quiere decir que el que debe costear los gastos de transferencia es el comprador, sujeto a los acuerdos que puedan efectuarse entre las dos partes.
Muchas veces, las transacciones de este tipo generan dudas entre las partes para asumir el riesgo de la compra-venta. En estos casos, alguna de las partes interesadas, o ambas, suelen solicitar la contratación de un gestor del automotor para realizar el trámite. Los registros del automotor aceptan que un tercero ejecute la gestión de la transferencia, siempre y cuando acredite un poder legalmente confeccionado. Por este servicio, se debe abonar una suma de dinero que se acuerda directamente con quien realiza la diligencia. Sin embargo, solicitar la ayuda de un gestor no es obligatorio, por lo que los interesados pueden consultar en el mismo registro la secuencia de trámites a seguir.
Es muy importante tener en cuenta que, si no se realiza la debida transferencia de dominio del automotor, las responsabilidades siguen recayendo sobre el antiguo dueño del automóvil, pudiendo esto complicar jurídicamente tanto al comprador como al vendedor. Dichas complicaciones no sólo tienen que ver con que el nuevo dueño no esté circulando con la papelería correspondiente, incumpliendo la ley, y estando expuesto a sufrir infracciones, sino que también en el indeseable caso de sufrir un accidente o siniestro, deberán ser tomadas en cuenta ambas partes para la resolución del conflicto, lo que puede generar amplios problemas legales y costos mucho más elevados. Esos son los riesgos de vender y comprar autos de segunda mano.