DISEÑO

El diseño de este teatro en casa es bastante peculiar, ya que a diferencia de lo que estamos acostumbrados, solamente se compone de una bocina vertical que funciona como subwoofer, y una consola central muy alargada con bocinas en sus laterales, y con controles en el centro de la barra.

El subwoofer mide 11.4 x 42.1 x 39.5 cm, mientras que las de la consola central es de 138cm de largo, 7.3 cm de alto y 7.8 cm de profundidad, así que como puedes ver, acomodarlo en cualquier lugar de la casa, resulta muy sencillo.

CONTROLES FRONTALES

Cuenta con muy poco botones en la parte central, todos son físicos y se limitan a las funciones básicas de reproducción, atrasar, adelantar y pausar. En sí las funciones avanzadas se manipulan desde el control remoto.

CONECTIVIDAD

Las opciones de conectividad son muy escasas, y más aún si tomamos en cuenta que el precio no es precisamente lo más accesible. De todo lo que estamos acostumbrados en un teatro en casa, este solamente ofrece una entrada para audífonos, una salida HDMI y una entrada óptica.

EXPERIENCIA DE USO

La calidad de reproducción no es mala, pero definitivamente es un producto que difícilmente recomendaría a alguien, a menos que sea una persona que se vea atraída por el diseño tan peculiar, de ahí en fuera la inversión aparentemente más baja que se hace para comprar este reproductor, a la larga termina siendo un pesar por las escasas opciones de conectividad, y la potencia de audio que se queda en los estándares de “promedio”.

ECUALIZACIÓN 

Tiene opciones predeterminadas de ecualización para poder regular los bajos, lo cual resulta bastante útil al momento de estar visualizando películas con muchos efectos especiales.

BOCINAS 

En conjunto, el subwoofer y las bocinas que se encuentran en los extremos de la consola central, dan una potencia de reproducción de 310W, lo cual es suficiente para cubrir una habitación, pero para nada ofrece una experiencia envolvente y destacable.