Samsung anunció que detendrá la venta de su phablet Galaxy Note 7, a tan solo dos semanas de haberlo puesto en el mercado a nivel mundial, debido a varios reportes de fallas con la batería del mismo.
Además, reveló que aquellos consumidores que lograron adquirir uno de estos dispositivos en los primeros días de venta, podrán intercambiarlo por un nuevo equipo.
Según el New York Times, son 2.5 millones de phablets los que los usuarios deberán regresar. Un hecho sin precedentes en la industria.
La medida de Samsung no es exagerada en lo absoluto. Al 1 de septiembre, se han reportado 35 casos en los que los usuarios aseguraron que sus Note 7 se incendiaron. Se sabe que la falla tiene que ver con algún defecto de fábrica en celdas de la batería del teléfono.
Como bien señala el New York Times, este hecho surge en un momento muy inoportuno para Samsung, ya que estamos a menos de una semana de que Apple, su máximo rival en telefonía móvil, haga el anuncio oficial de la nueva generación de iPhone.
No se tiene certeza de la fecha en la que el Galaxy Note 7 volverá al mercado.
