Al parecer en un futuro muy cercano los teléfono inteligentes podrán detectar COVID-19, VIH, Tuberculosis y detectar otros agentes causantes de enfermedades.
Ya se han realizado pruebas con teléfonos inteligentes para detectar el VIH, la malaria, la tuberculosis y contaminantes de alimentos.
Por ejemplo, el dongle mChip, es una prueba basada en un teléfono inteligente para detectar el VIH y la sífilis, que existe desde 2015. Y la segunda fase de ensayos se completó en abril de 2020.
Por lo cual los resultados aún están pendiente, pero además falta otra fase de ensayos. Ahora también se está trabajando para detectar COVID-19
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¿Como funciona?
La forma más común es usar etiquetas diseñadas para reaccionar ante la presencia de una sustancia específica, como un virus o bacteria en particular y enviar la información al celular.
Para analizar el líquido de un hisopo de garganta o una muestra de sangre, se pone en contacto con la etiqueta sensible a lo que se está buscando.
Luego la reacción de la etiqueta genera una señal de luz, que el teléfono detecta e interpreta a través de su cámara, por medio de un dispositivo electroquímico.
Los resultados se mostrarán en una aplicación en el teléfono con indicaciones para comunicarse inmediatamente a las autoridades pertinentes.
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Para COVID-19
En el caso del nuevo Coronavirus, lo que procede es que las etiquetas existentes se adapten para reaccionar al material genético del SARS-CoV-2 o los anticuerpos humanos contra el virus. Ya se está trabajando en esta nueva tecnología.
Aunque, la mayoría de las pruebas basadas en teléfonos inteligentes se encuentran actualmente en etapa de prueba. La inmensa presión para controlar la pandemia puede acelerar en gran medida el desarrollo de una prueba COVID-19.
Las pruebas para COVID-19 desde un smartphone se podrían usar para detectar material genético viral del tracto respiratorio, durante las primeras 2-3 semanas de infección.
En segundo lugar, podrían usarse para detectar anticuerpos desarrollados contra el virus en la sangre, lo que muestra si alguien ha tenido el virus en el pasado.
La información de estas pruebas puede brindarnos una mejor información sobre casos asintomáticos e inmunidad.
También serviría para saber lo que hay en las superficies, como en los empaques de alimentos, por ejemplo a la hora de pedir comida para llevar o recibirla a domicilio.
