La información electoral de 91 millones de mexicanos está a la venta en internet, alertaron expertos en seguridad digital; dichos datos pertenecerían a una base robada al Instituto Nacional Electoral, INE.
De acuerdo con una publicación de la cuenta Alon Gal (@UNDERTHE BREACH), parte de la información que está la venta incluye los registros de 91 millones de mexicanos y habría sido obtenida directamente del Instituto Nacional Electoral.
Adicionalmente, el perfil indica que la base de datos es actual, es decir, fue obtenida en 2021 y contiene información privada; siendo ésta la segunda vez que el INE sufriría una vulneración.
Pero quién es ALON GAL
Además de publicar sobre vulnerabilidades y maleware en línea, se trata del cofundador y director de Tecnología (CTO) de la compañía de seguridad digital Hudson Rock, según su perfil. Vale la pena señalar que la empresa israelí es de reciente creación, aunque en su portal aseguran que sus investigaciones han sido retomadas por medios como The New York Times.
Sobre la primera vulnerabilidad...
La misma cuenta publicó un enlace a su blog en el que explican cómo fue la infracción de 2016. Dicho tweet concluye que los campos que incorpora la nueva base son diferentes con los que se tenían previamente registrados, lo que confirmaría se trata de una nueva vulnerabilidad.
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En aquel año DataBreaches.net publicó que esto se debía a que una base de datos con información de más de 93.4 millones de ciudadanos mexicanos mexicanos se alojó en un servidor fuera de México y de allí se subió a Amazon. La pregunta es por qué no se protegió adecuadamente la información de los ciudadanos.
Según el portal, la base pesaba 132GB y contenía la información de registro de votantes de 93,424,710 ciudadanos mexicanos; posteriormente esta información se confirmó en el blog MacKeeper.
De acuerdo con ambos sitios, el registro incluía el nombre de la persona, la dirección completa, la fecha de nacimiento, los apellidos de la madre y el padre, la ocupación y su código único de credencial para votar (número / identificador).
Según las publicaciones, en ese entonces el autor informó su descubrimiento en México al Departamento de Estado, la Oficina de Asuntos Mexicanos del Departamento de Estado y en Estados Unidos al Servicio Secreto, Departamento de Seguridad Nacional y Embajada de México en ese país.
Hasta ahora no ha habido una respuesta oficial que confirme o niegue la información.
