Review - Rematch, el adictivo juego de fútbol para fans y no tan fans de los deportes

En 2022 el estudio independiente Sloclap sorprendió al mundo con Sifu, un fenomenal beat ‘em up que se caracteriza por un complejo sistema de combate que brinda al jugador una sensación de mayor entendimiento y control sobre los movimientos y ataques que el protagonista ejecuta, un acercamiento que se inclinó por mayor reto e inmersión en comparación con la lógica de “botonazos aleatorios” con la que se suele vincular a este tipo de propuestas.

 

Tres años después, el estudio regresa con Rematch, un título que puede observarse como un ejercicio similar a lo que Sifu significó para los beat ‘em ups, pero ahora en torno a los juegos de fútbol, en razón del énfasis que se pone sobre la individualidad de cada jugador, el gameplay simultáneamente sencillo y complejo, la experiencia de inmersión, y la sensación de control que se le transmite al usuario con respecto al balón, el campo, sus compañeros y el equipo contrario, factores que lo hacen una propuesta que no nada más se distancia de los sospechosos comunes del balompié en gaming, sino que también invita a otras audiencias a adentrarse, emocionarse y divertirse a partir de un ángulo que combina el sabor casual arcade con un enfoque competitivo.

 

 

Fútbol para fans y no tan fans

 

Es importante dejar claro que Rematch es un multijugador en línea. El usuario puede elegir participar en partidas rápidas 3v3, 4v4 o 5v5, o bien en juegos rankeados (sólo 5v5) a los que se tendrá acceso una vez que se alcance el nivel 5 en duelos casuales. El eje de éste título es directo: meter goles, sin que medien las reglas y demás conceptos del fútbol, como faltas, penales, fueras de lugar, tarjetas, saques de esquina ni nada que atente contra el flujo de la experiencia.

 

Cuando los primeros avances del juego salieron a la luz, las comparaciones con Rocket League no se hicieron esperar. Después de todo, ambos giran en torno al soccer, cuentan con perspectiva en tercera persona y los usuarios se ponen al mando de un miembro específico del equipo, es decir, no de la escuadra completa. Pero mientras el título de Psyonix se centra más en el espectáculo y en la irrealidad, el de Sloclap se apega a una experiencia aterrizada, aún dentro de su matiz arcade.

 

Por ejemplo, un balón en el aire puede volearse con la cabeza presionando un botón, o bien puede bajarse pulsando otro comando para llevárselo corriendo por el campo; ejecutar con éxito un pase no es automático y requiere indicar la dirección deseada; para hacer una “bicicleta” se deberá pulsar dos botones, mientras que para disparar a la portería será necesario presionar (o mantener) el gatillo y apuntar manualmente hacia el punto en que se quiera colocar el esférico. Todo esto —junto con un amplio abanico de mecánicas— en el marco de un partido que se desarrolla sin reglas ni interrupciones y que sólo permite descansar cuando entra en pantalla la repetición tras meter gol.

 

 

Con lo anterior se antoja que estamos ante un juego de mecánicas complicadas, y si bien es cierto que dominarlo implica conocer y poner en práctica tanto lo que Rematch explica como aquello que no, también lo es que el perfil de la propuesta apela a quienes busquen diversión rápida casual y a quienes quieran explorar a detalle el potencial competitivo. Para ofrecer un punto de referencia, nosotros no somos entusiastas de los deportes, mucho menos de los videojuegos de deportes, y aún así hemos estado riéndonos, frustrándonos, emocionándonos y divirtiéndonos durante sesiones de juego que han durado varias horas; hemos sido testigos de nuestra mutación a directores técnicos de sofá, con todo y los correspondientes reclamos a la pantalla ante una oportunidad que no se consumó. Rematch realmente es un juego adictivo.

 

Además, al ser 100% online, ofrece la posibilidad no sólo de formar parte de partidos casuales o rankeados con completos desconocidos, sino también de crear juegos personalizados con amigos o de unirse a partidas privadas con empleo de código. Al respecto, no hemos tenido oportunidad de jugarlo con conocidos, pero queremos creer que la experiencia es marcadamente más divertida.

 

Fase inicial

 

Es importante señalar que al momento de elaborar esta review, Rematch se encuentra en una fase inicial, en concreto, en su temporada 0, con contenido conformado en su mayoría por cosméticos que se obtienen con moneda del juego, o bien con dinero real (cabe precisar que Rematch no tiene costo completo —-570 MXN en el caso de la versión de PlayStation 5).

 

 

Y es por esta misma fase inicial que el juego aún se percibe con algunos bugs que han sido corregidos a través de varios parches. Por ejemplo, en nuestro primer día con Rematch hubo varios momentos en los que el balón se quedó estático y hubo otros tantos en los que la conexión se percibía tropezada y con afectación a los movimientos ejecutados, denotando problemas con el servidor. A estas alturas, podemos afirmar que las sesiones son fluidas y cada vez con menos errores como los de los primeros días, y confiamos en que Sloclap y la publisher Kepler pondrán en marcha todo aquello que sea necesario para hacer de Rematch un juego que se convierta en referencia, tal como ocurrió con Sifu.

 

Conclusión

 

Nosotros nos acercamos a Rematch atraídos por la promesa de una experiencia con sabor arcade, de la mano de las mismas compañías que trajeron al mundo Sifu, nuestro juego favorito de 2022. Lo que encontramos es un título que mezcla las sensibilidades “arcaderas” con jugabilidad profunda, uno que, a pesar de las múltiples fallas con las que llegó, nos ha tenido disfrutando la lógica de un deporte que ni siquiera nos interesa.

 

Éste es un juego adictivo y emocionante que, ofreciendo diversión a usuarios casuales y competitivos, abraza el tren de pensamiento detrás de Sifu: proponer un twist de reto e inmersión dentro de un género en el que parecía ya no haber espacio para la innovación.

 

Calificación: 8.0
Rematch
Publisher: Kepler
Desarrolladora: Sloclap
Revisado en PS5. También disponible en Xbox Series y PC