Finalmente este viernes se estrena la cuarta entrega de Toy Story y si te preguntas ¿A qué se debe tanta emoción? Pues bien, la primera entrega de la película fue en 1995, muchos de nosotros éramos unos niños, por supuesto que pagaremos por ver esta nueva entrega, pero antes ¿Por qué no refrescar la memoria?
Recopilamos cinco fabulosos momentos de esta increíble historia:
1. ¡Caaambios extraños que hay en mi! Buzz llega como un balde de agua fría a la increíble vida de Andy y Woody, el vaquero no había sentido tal hueco emocional hasta ese momento, cuando no sólo el niño de su vida cambia de bando sino también todos sus juguetes amigos. Si esta escena no te hizo sentirte triste por Woody, eres un ser sin sentimientos.
2. Buzz descubre que en verdad es un juguete y no puede volar. Después de salir de casa de Andy, todo se torna extraño, turbio y sospechoso, no es para más, vivir con Zid no es el ideal de todo juguete. En uno de sus intentos por saberse fuerte y empoderado, Buzz se lanza al vacío de las escaleras, cae con un brazo roto y se convierte en la señora Nesbit.
3. Woody es secuestrado. El Sr. Pollo logra el objetivo de robar a Woody para que forme parte de su colección y ¡El campamento está cerca! Hemos de admitir que una de las escenas más fabulosas es cuando dan retoque a Woody, tanta precisión y dedicación, no deja de ser nostálgico el momento en el que el nombre de Andy es borrado de su bota.
4. Jessie cuenta su historia. Si pensabas que los sentimientos no podrían estar más a flor de piel, te equivocas. Hemos de admitir que soltamos un par de lágrimas al conocer la historia de la vaquera más extrovertida del oeste ¿No te sientes identificado? Puede que no te hayan roto el corazón o tal vez omitiste esa parte de tu vida por tanto dolor. Pero, no te preocupes, ella se recupera al llegar con Andy.
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5. ¿El último adiós? Todo parece perdido en Toy Story 3, cuando están a punto de ser quemados, se toman de las manos y esperan lo peor, hasta tú cerraste los ojos porque era demasiado dolor para tu infancia olvidada. Incluso quisiste regresar a buscar aquellos juguetes que arrumbaste o tal vez, ya ni siquiera están contigo. Lo cierto es que Pixar removió sentimientos e hizo llorar hasta al más rudo.
Podríamos mencionar mil momentos más ¿Por qué no armar un mini maratón Toy Story antes de ver la cuarta entrega? Sólo para tener todo fresco. Ya agregaremos más escenas después de ver la película.
