- Diseño espectacular, agresivo, elegante y deportivo a la vez. Gran nivel de tecnología para asistir al conductor, pantalla táctil de 8 pulgadas con MyFord Touch, motor EcoBoost (turbo) con 240 caballos de fuerza. AutoPark Assist
- Ni la versión más equipada cuenta con faros de xenón. Los botones táctiles del sistema de audio y aire acondicionado son demasiado sensibles y puedes activar funciones sin querer.
Entre Parentesis
¿Eres una persona muy apegada a la tecnología y buscas un auto con un gran diseño, buen desempeño y equipamiento superior? El Ford Fusion es para ti, conócelo a fondo aquí.
Exterior que enamora
Lo primero que sentí cando vi por primera vez el Fusion fue sorpresa, en mi cabeza se veía como cualquier cosa menos un Ford. La generación actual de este sedán se presentó en enero de 2012 en el Salón del Automóvil de Detroit y de inmediato surgieron las comparaciones con el Aston Martin. Sí, están leyendo bien, un Ford estaba siendo comparado con un Aston Martin gracias al nuevo diseño, sobre todo, de su parrilla, que en conjunto con sus alargados faros, spoiler trasero y rines de 19 pulgadas ofrecen un look agresivo y deportivo, sí, pero muy elegante a la vez.
Hay que tener cuidado con este coche, porque cuando te subes a él puedes transformarte en un ser presumido, ansioso por atraer miradas... Y lo mejor de todo es que esto sucede tan pronton empiezas a circular en la calle: el Fusion es un auto con un diseño especatcular que simplemente atrae miradas.
¿Y adentro?
El interior del Fusion va completamente acorde con su exterior, es elegante, amplio y se siente muy tecnológico, principalmente porque en medio del tablero resalta una pantalla de 8 pulgadas con el sistema MyFord Touch y Sync, con los que podemos hacer prácticamente todo: enlazar el teléfono por Bluetooth y usarlo como manos libres, reproducir su contenido muscial en las bocinas del Fusion y visualizar la agenda y registro de llamadas de forma muy sencilla. También está el sistema de mapas y GPS, el cual funciona muy bien, sin embargo, buscar una dirección o introducirla puede ser tan tedioso que quizá optes por usar Waze o Google Maps en tu celular.
También vale la pena destacar que los controles para manipular tanto el audio como el sistema de aire acondicionado son táctiles, y eso fue una agradeable sorpresa en cuanto a diseño, sin embargo, son demasiado sensibles y esto puede provocar que cambies de canción o actives alguna funsión sin querer cuando subes el volumen.
Finalmente me gustaría dedicar unas líneas al panel de instrumentos, que es, en su mayoría, digital: al centro del cluster sólo vemos el velócimetro como el de cualquier auto, que está flanqueado por dos pantallas más, una que muestra diferentes opciones, como un tacómetro digital, el indicador de nivel de gasolina, la economía de combustible y los datos de la computadora de a bordo, y del lado derecho está una especie de extensión de la pantalla principal, donde puedes ver qué medio se está reproduciendo, un acceso directo al teléfono o las indicaciones del GPS.
Y hablando específicamente de conectividad, el Fusion Titanium Plus cuenta, además de con Bluetooth, con dos puertos USB para conectar un par de memorias, una ranura SD para una tarjeta en donde están almacenados los mapas y un puerto RCA para conectar cualquier reproductor mp3.
Ok, se ve bonito. Pero, ¿y el motor?
Hablando especificamente de la versión Titanium Plus, que es la que tuvimos a prueba, Ford se encargó de dotar al nuevo Fusion de un motor muy acorde a su look: se trata de un propulsor de cuatro cilindros y 2.0 litros —que por tamaño no suena muy interesante—, pero, mucho ojo, es un motor EcoBoost, lo que quiere decir