Un reporte de la publicación The Korea Herald dio a conocer que después de lo sucedido con las baterías de los Galaxy Note 7, Samsung tomó decisiones al respecto.
Se sabe que las nuevas unidades que la compañía entregue en intercambio a los consumidores, no incluirán baterías de su propia subsidiaria: Samsung SDI.
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Samsung SDI es uno de los fabricantes más importantes de baterías de ion de litio a nivel mundial. Alrededor del 70% de los lotes de Galaxy Note 7 que se fabricaron en primera instancia, contiene sus fuentes de energía. El resto corrió por parte de la compañía china ATL.
Según The Korea Herald, Samsung apostará por ATL, para que los nuevos phablets en intercambio incluyan sus baterías. La compañía surcoreana se encuentra en el proceso de recoger más de 2.5 millones de Note 7, incluidos los que se desplazaron en México.
The Wall Street Journal revela que esta acción de servicio al cliente le costará a Samsung alrededor de 900 millones de dólares. A pesar de ello, expertos aseguran que le ayudará en el largo plazo en cuestión de imagen.