Apple podría retrasar la llegada del iPhone 8 hasta octubre o noviembre de este año, en lugar de septiembre, como acostumbra, de acuerdo con un reporte del diario chino Economic Daily News, retomado por DigiTimes.
Según el rotativo, problemas técnicos relacionados con el proceso de laminación de los paneles curvos OLED y la incorporación de un sensor 3D, serían las causas de la demora.
Por lo pronto, Nikkei informó esta semana que Apple ordenó 70 millones de pantallas OLED a Samsung, que estarían destinadas para la versión premium de la familia de celulares de Apple de 2017.
Y es que las fuentes del medio indican que habrá tres modelos: uno que luciría una pantalla OLED de 5.2 pulgadas sin biseles, con precio superior a los mil dólares, casi 19 mil pesos; y otros dos con displays LCD de 4.7 y 5.5 pulgadas.
Los tres iPhone de 2017, señalan, tendrían carga inalámbrica y serían a prueba de agua. El primero prescindiría del botón de inicio y los otros dos sí lo tendrían.
Apple, cuando lance sus teléfonos, encontrará en el camino al LG G6 y a un alabado Galaxy S8, principalmente. De hecho, DisplayMate le ha dado a la pantalla de este último, una calificación perfecta.
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