La compra de autos en México es un mercado grande, pues cada día cientos de personas adquieren un vehículo nuevo por medio de planes de financiamiento, pero ¿qué tanto te conviene comprar un coche a crédito o de contado?
Beneficios de comprar un auto a crédito
Tiempo para manejar tus pagos: un financiamiento te permite pagar una cantidad mensual baja de tu auto, lo que te da mayor liquidez en tus gastos.
Seguro incluido: con el pago de tu crédito se incluye el abono de tu seguro, lo que te dará protección al manejar tu coche.
Buen historial crediticio: tener un crédito automotriz te beneficiará en crear un historial ante Buró de Crédito.
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Desventajas de comprar un auto a crédito
Pagas más del valor del auto: sacar tu auto por medio de un crédito conlleva gastar un monto mayor al valor original del coche.
Riesgo de mal historial: es fundamental que pagues a tiempo tu crédito automotriz para evitar una mala calificación en Buró de Crédito.
Beneficios de comprar un auto de contado
Menos trámites y ahorro de tiempo: comprar un auto de contado reduce el papeleo que debes de cumplir.
Olvídate de deudas: pagar en una sola exhibición evitará que contraigas una deuda de años y el costo será menor.
El auto es tuyo al instante: al contrario de un crédito, pagar de contado tu auto garantiza que eres propietario del vehículo desde el primer día.
Comprar un auto a contado reduce la disponibilidad de dinero
Desventajas de comprar un auto de contado
Te descapitalizas: toma en cuenta que pagar un auto de contado es una suma importante de dinero que puede afectarte al momento de enfrentar una emergencia o simplemente destinarlo para invertir o emprender un negocio.
Contratar un seguro: tendrás que hacerte cargo del seguro de auto pues al no tener un financiamiento no existe cobertura para el vehículo.
No generas historial crediticio: este esquema de pago no te da una referencia en tu historial crediticio.
Si bien, cada modalidad de pago tiene sus ventajas, es importante que tengas un plan a futuro el cual te permita sacar más provecho a tu dinero. Por ejemplo, si tienes la cantidad para pagar al contado, puedes comprar tu auto a crédito, apartar cierta cantidad de abonos ante una emergencia y el resto del dinero invertirlo para obtener ganancias que te permitan pagar el coche con el paso del tiempo.