Científicos del Centro de Nanotecnología y Nanociencia de la Universidad de Nottingham, Inglaterra, lograron grabar sobre un pelo la tabla periódica de los elementos. El increíble proceso se realizó enfocando iones hacia la diminuta superficie, sólo así se logró escribir en un espacio tan reducido.
Para darse una idea del microscópico tamaño de la escritura, si se transcribiera tal cual este grabado en un post-it, cabría un millón de veces y aún sobraría espacio.
¿Quién pensaría que escribir sobre un cabello sería posible?