Google llevó a cabo un estudio con la ayuda de la Universidad de Illinois y la Universidad de Michigan durante dos años para descubrir fallas de seguridad en el uso del correo electrónico. Los resultados fueron prometedores y estas son algunas de las cosas que se detectaron:
La cantidad de mensajes encriptados de diciembre 2013 a octubre 2015 aumentó de 33% a 61%. Durante el mismo periodo, el porcentaje de mensajes encriptados con TLS enviados desde Gmail a usuarios de otros servicios de e-mail gratuito, aumentó de 60% a 80%. Por último, más de 94% de los mensajes que llegan a Gmail utilizan algún método de autenticación para combatir fraudes.
El estudio reveló regiones de internet y servidores DNS dedicados a la debilitación de la encriptación de mensajes para facilitar la intercepción y modificación de correos por parte de atacantes informáticos. Google ya trabaja con investigadores para prevenir estos ataques. Mientras tanto, los usuarios recibirán notificaciones cuando un correo que podría haber sido alterado llegue a sus bandejas de entrada.