Sandy Bridge es el nombre clave de una microestructura para procesadores desarrollada por Intel como sucesora de Nehalen.
Entre las características que hay que destacar en estos nuevos circuitos es que continúan con las tecnologías Hyper Threading y Turbo Boost.
El procesador está diseñado para las computadoras portátiles de alto desempeño y las especializadas en juegos. Los equipos que tengan un Sandy Bridge en su interior deben tener un mínimo de 4GB de memoria DDR3, gráficos Monility Radeon HD 6550 o HD 6570 y pantallas que van de las 15.6 a 17.3 pulgadas.