Cuando Apple presentó por primera vez el iPad en 2010, fue un gadget que maravilló a la audiencia. Para ese entonces no había nada con qué comprarlo en el mercado; si bien Microsoft ya había incursionado en el concepto de “tablet”, nunca lo comercializó.
El iPad era una verdadera ganga, teniendo en cuenta que pagar quinientos dólares por un dispositivo portátil de Apple parecía un chiste comparado con el elevado precio de una MacBook.
Tan sólo tres años después, en 2013, los fabricantes de Android utilizan “los precios bajos” como un arma. Ahora vemos impresionantes tabletas con grandes capacidades de marcas importantes que cuestan alrededor de doscientos dólares, lo cual hace ver a cualquier dispositivo portátil de la manzana como algo extremadamente caro e inalcanzable.
El nuevo iPad mini con pantalla Retina costará $399 dólares. Si bien la diferencia entre gadgets no es tanta hablando de resolución de pantalla, capacidades de almacenamiento y rendimiento de procesadores, ¿por que los iPad de Apple son tan caros? A veces la respuesta más sencilla es la correcta: Porque pueden.
Un análisis reciente de la muy respetada analista Benedict Evans muestra que en términos de ganancias mundiales de tabletas, Apple está perdiendo cuota de mercado. Existe una pregunta importante que mucha gente no se está haciendo cuando hablamos de tabletas y es: ¿Quiénes y qué está perdiendo Apple en el mercado de las tablets?
No hay duda de los números en la tabla de arriba, que ni siquiera incluyen los envíos de Kindle Fire, la tableta económica de Amazon (ya que las ventas son mínimas a nivel mundial). Los envíos de tabletas Android están creciendo rápidamente, mientras que la participación del iPad en el mercado mundial está en declive. Como señala Evans, sin embargo, hay advertencias importantes.
En primer lugar, los envíos de tabletas Nexus (en naranja) son básicamente insignificantes. Se trata de un dispositivo que es asequible y a la vez, está bien equipada; sin embargo, las ventas son mínimas. ¿Por qué? Evans también se hace la misma pregunta cuando las ventas del iPad se ven claramente superadas por las ventas de Android.
Lo más destacable de la tabla es el hecho de que el subconjunto de tablets Android que está creciendo más rápidamente es el segmento tablet “sin marca” (en rosado) que se venden en toda China. Estas tablets son en extremo baratas y Apple no tiene absolutamente ningún interés en competir contra ellos, por supuesto.
De hecho, a estos dispositivos tan baratos y sin marca ¿se les puede considerar tablets como tal?
"¿Por qué las personas compran dichas tablets sin marca, mejor conocidas como “de caja blanca?” Evans plantea la misma pregunta en una publicación de su blog. “¿Para qué las usan? Tal parece que se están utilizando para navegar un poco en la web, para juegos gratuitos, tal vez la lectura ocasional de algún libro y un montón de consumo de video.
De hecho, se podría argumentar que dichas tabletas de caja blanca son la competencia para fabricantes de televisiones y no de iPads, ni del Nexus. Pero independientemente del para qué están siendo utilizadas, no están siendo utilizadas de la forma en que se utilizaría un iPad”, publica en su blog. En efecto, un iPad o cualquier otro gadget de una buena marca tiene mucho más potencial y ni qué decir de la calidad del producto y su durabilidad o resistencia.
Desde esa perspectiva, Evans señala que de entrada un iPad de trescientos dólares no tiene competencia en absoluto y agrega que se pueden delimitar dos mercados muy diferentes: “La visión Post-PC, donde Apple es dominante, y productos de muy bajo margen, que también se llaman tablets, pero que en realidad son un producto totalmente diferente.” (…) "el iPad todavía no se enfrenta a una fuerte amenaza competitiva,” señala la analista.
En conclusión, el iPad es caro porque quiere y puede, tomando en cuenta la calidad de los materiales –los cuales son los que dictan su potencial– y el público al que va dirigido. Puede que la tableta estrella de la compañía de Cupertino llame la atención de todo el mundo; sin embargo, hay que aceptar que no es un dispositivo que se ajuste a todos los bolsillos. Está muy bien enfocado a cierto tipo de público, con ciertas necesidades y que sin ninguna preocupación pueden pagarlo, aunque el modelo anterior tenga medio año de diferencia.
En pocas palabras, mientras haya un mercado dispuesto a comprar gadgets de gran calidad, aunque cuesten más, Apple seguirá vendiendo, sin preocuparse de que la competencia siga reduciendo sus costos para competir. Apple sabe que su nicho es otro y están enfocados en ofrecer una experiencia completamente diferente y superior para sus consumidores.