Pese al buen momento por el que pasan las marcas PlayStation y Xperia, financieramente las cosas no pintan del mejor color para Sony, y es que la compañía reportó pérdidas por $1, 260 millones de dólares —por segundo año consecutivo— para el cierre del año fiscal 2014, concluido el pasado 31 de marzo.
Las pérdidas, señala Sony, están relacionadas con la salida de la compañía del negocio de fabricación de computadoras —Sony vendió su marca VAIO en febrero pasado— y con la caída en las ventas de discos Blu-ray.
No obstante, éste no será el último año de pérdidas para Sony, advirtió el director financiero de la compañía, Kenichiro Yoshida, quien advirtió que Sony gastará aproximadamente $1, 320 millones de dólares para completar la reestructuración de la compañía, misma que espera finalizar durante lo que resta del año.
"Este año todo va a ser sobre aguantar y sobrellevar la reestructuración", comentó. "Me gustaría finalizar la reestructuración este año."
PlayStation y Xperia, los activos
Pese al mal momento vivido por la compañía, Sony reportó buenos números en lo que respecta a sus marcas PlayStation y Xperia. Y es que en lo que respecta a la primera, el lanzamiento de PlayStation 4 en noviembre pasado generó a Sony ingresos por $75 mil 400 millones de dólares, un incremento del 14.3% respecto del año pasado. Desde su lanzamiento, Sony ha vendido 7 millones de consolas PlayStation 4 a nivel mundial.
Por su parte, la división de móviles también observó números favorables para Sony, reportando ventas por $15 mil 800 millones de dólares. Según cifras de IDC, Sony posee el 3.8% del mercado global de smartphones.
¿Más divisiones en venta?
Con la presión de inversionistas y de sus competidores locales, Yoshida dejó entrever que además de VAIO, Sony podría abandonar otros negocios, entre ellos, la división Home Entertainment, misma que acumula pérdidas por ¥790 mil millones de yenes (cerca de $7,750 dólares).
"En ciertas ocasiones actuamos de forma tardía e ineficiente", puntualizó Yoshida.
Por otra parte, trascendió que Sony podría abandonar la fabricación de televisores OLED para concentrarse en la producción de pantallas 4K. Sony espera mejorar sus finanzas con los lanzamientos del Xperia Z2, así como la introducción de servicios como PlayStation Now a finales de este año.