Fue fundada en 2010 por Lei Jun, y tan sólo cuatro años más tarde la empresa se ubica como el quinto fabricante de teléfonos inteligentes más importante a nivel mundial. Se trata de Xiaomi (que recientemente cambió o "rebautizó" su nombre a MI), que sólo durante el segundo trimestre de 2014 vendió 15.1 millones de teléfonos. La cifra, apabullante por sí sola, adquiere otra relevancia cuando se ubican los territorios donde la compañía tiene presencia: China, Singapur, Filipinas, Malasia y otros territorios del sur de Asia. Y este año iniciará operaciones en Rusia, Turquía, Brasil y México.
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La fuente de éxito de la firma está plenamente identificada: La venta de teléfonos competitivos a precios accesibles, como el Mi 4, un dispositivo que rivalizará con el iPhone 6, el Galaxy S5, el Xperia Z2 y el LG G3, pero que costará la mitad que sus rivales. ¿El siguiente reto de la compañía? Volver atractivos sus productos para el mercado internacional. Para ello, la firma contrató al ex director de desarrollo de producto de Android, Hugo Barra, quien reconoció que parte del éxito de Xiaomi recae en el uso de aplicaciones nativas que en Occidente no tienen presencia. Y citó el caso de Wechat:
"Todas las personas que conozco usan Wechat. No usamos teléfono, mensajería instantánea o mensajes de texto. Es cómodo cuando toda tu vida social está en una sola plataforma."
La expansión de Xiaomi en China ha sido enorme. Según la firma de análisis Strategy Analitics, durante el segundo trimestre de 2013, la firma vendió 4.1 millones de dispositivos. Un año después, la cifra alcanzó los 15.1 millones. No obstante, Samsung y Apple continúan dominando el mercado, con una participación de 25.2% y 11.9% respectivamente. Pero no hay punto de comparación entre la antigüedad de Samsung y Apple frente a Xiaomi, que ya posee el 5.1% del mercado.
La firma cuenta con 4 mil empleados, y en palabras de Barra, la compañía podría ser descrita como una fusión entre Apple y Google. Para el software, indica, la compañía utiliza Android, pero cuenta con su propia tienda de aplicaciones. Para el hardware, la compañía diseña sus propios teléfonos, pero, como Apple, depende de fabricantes externos para la producción de sus dispositivos.
"La administración de la cadena de insumos de Apple es de lo mejor que hay. Hacemos las cosas de forma similar," agregó.
Por otra parte, parece que el terreno de los smartphones cederá hacia las "pequeñas compañías". El reporte de Strategy Analytics indica que tanto Samsung, Apple y LG vieron disminuida su participación en el mercado durante el segundo trimestre, en cambio, Huawei, Lenovo y Xiaomi vieron incrementada su participación.
Por ahora, el futuro de Xiaomi está en el Mi 4, que a una semana de su lanzamiento se ubicó entre los diez smartphones más vendidos del mundo. Y no es para menos. El terminal cuenta con un procesador Qualcomm Snapdragon 801 a 2.5 GHz, 3 GB de memoria RAM y 16 GB de almacenamiento interno expandibles a 64 GB.
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