Los pilares de un coche son los soportes casi verticales porque unen el techo de la carrocería. Estos pilares reciben su nombre con letras alfabéticas de la A a la D de forma correlativa y comenzando desde la parte delantera hasta la trasera del vehículo.
Por eso, el pilar A es el primero que se encuentra y el más próximo al frontal, al capó. Es el único que existe en todos los coches, ya que da soporte al cristal del parabrisas, incluso en los descapotables, cuando repliegan el techo.
Este pilar también es el más fuerte, ya que debe soportar la fuerza producida en un vuelco e incluso está reforzado en los descapotables. Está construido en acero de ultra alta resistencia y sobre él, además del parabrisas, también se acoplan la mayoría de puertas delanteras.
De no ser un descapotable, como ya se ha comentado, el pilar B es el siguiente. Sujeta el techo en su zona central y su posición suele ser totalmente vertical.
Si el vehículo tiene más de tres puertas (contando el portón trasero), este pilar se ubica entre las puertas delanteras y traseras. Si es de solo tres puertas, es el pilar que se ubica donde se cierra la puerta (o abre, como en el icónico Seat 600 de puerta delantera de apertura suicida) y comienza la zona trasera sin puertas.
En el antiguo Seat 800, el pilar B es donde se anclaban todas las puertas
En este pilar se suelen fijar los anclajes de los cinturones delanteros y también es uno de los más robustos del coche, ya que su posición es clave para la estructura de todo el vehículo. Si este pilar da soporte a la luneta posterior, se considera un pilar C.
Respecto a este pilar C, es el tercero al contar desde el frontal. En un coche de tres volúmenes de tipo sedán, sería el último, y ya se encontraría el maletero. Por eso, su función es rematar la rigidez torsional de la carrocería y absorber la energía que puede llegar del frontal en caso de colisión por esta zona.
Si se trata de un coche de tipo familiar, existiría otro pilar, el D y último, que enmarcaría la luneta trasera y que también asumiría las funciones del pilar C, como absorción de energía en caso de impacto o aumento de la rigidez estructural.