Aunque ya hace algunos años de este artículo de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), su tabla de precios permite hacerse una idea de cuánto cuesta cambiar una batería de móvil. Por ejemplo, según el modelo, una pieza nueva de Apple se puede adquirir por unos 89 euros; mientras que la de Samsung costará entre 18 y 89 euros. El ahorro entre comprar una segunda batería o adquirir un dispositivo nuevo es considerable.
Eso sí, hay que ser consciente de que esa nueva batería nunca tendrá la misma durabilidad que la original. A esas alturas, los componentes del teléfono ya se han ido desgastando y eso tiene un reflejo en el rendimiento de la batería.
El momento del cambio
La batería cada vez dura menos, pero realmente ¿cuándo es necesario reemplazarla? Hay señales claras que lo apuntan.
La batería se ha hinchado
En algunas ocasiones, la parte trasera del móvil (en el lugar en el que se aloja la batería) se abomba. Este indicio tan fácil de detectar se debe a la degradación de la batería, por la que se alteran sus componentes internos.
Las baterías de litio generan su energía mediante una reacción química, pero por causas como las sobrecargas, las temperaturas altas o simplemente el paso del tiempo, las cargas se vuelven defectuosas. La consecuencia es que se produce un gas que se acumula sin remedio y que hincha la batería.
Si ese es el caso, es totalmente necesario sustituirla, puesto que el teléfono podría llegar a incendiarse. Lo mejor es apagarlo y no volver a usarlo hasta que no se haya solucionado el problema
Funcionamiento errático de la batería