Wikileaks, la plataforma creada por el activista Julian Assange para la filtración de información gubernamental confidencial, publicó un paquete con 8 mil 761 documentos y archivos que describen herramientas con la que la CIA es capaz de hackear e infectar celulares, tabletas, computadoras y televisiones inteligentes. Wikileaks apenas publicó una porción denominada Year Zero (año cero) en alusión a las brechas de seguridad que son comunes durante los primeros día de circulación de un software nuevo, pero asegura que la filtración forma parte de un reporte más extenso llamado Vault 7. El primer paquete de información señala vulnerabilidades encontradas entre 2013 y 2016 en los sistemas operativos Android, iOS, Windows, Mac y Linux que permiten o permitían a la CIA tomar control de aparatos con esta clase de software.
Según explica Wikileaks, los documentos de la CIA fueron entregados por un excontratista de la agencia. "Parece que el archivo habría estado circulando entre antiguos háckers y contratistas del gobierno estadounidense de forma no autorizada, uno de ellos dio a Wikileaks porciones del archivo".
Apple, Google, Microsoft y Samsung serían las principales compañías afectadas por las herramientas de ciberespionaje, pues sus aparatos son los más populares: iOS y Android dominan el mercado de celulares inteligentes, Windows el de computadoras y Samsung el de televisiones inteligentes.
Por esta misma razón las tecnológicas fijaron postura ante la filtración hecha por Wikileaks. Apple refrendó en un comunicado su compromiso para proteger la privacidad de sus usuarios, al tiempo que señaló sus primeros análisis indican que la mayoría de sus dispositivos ya no son vulnerables a las técnicas de hackeo empleadas por la CIA.
Samsung, otra de las afectadas porque Vault 7 describe métodos codesarrollados entre la CIA y el MI5 –el servicio de inteligencia británico– para espiar a través de los micrófonos de sus televisiones inteligentes, detalló en un comunicado que las televisiones potencialmente vulnerables fueron vendidas entre 2012 y 2013, y que la brecha de seguridad fue cubierta mediante una actualización.
Microsoft limitó su postura a señalar que están investigando los documentos publicados por Wikileaks.
Google, una de las últimas en reaccionar a Vault 7, explicó que la mayoría de las vulnerabilidades han sido solucionadas a través de actualizaciones para Android y Chrome.
La CIA no ha confirmado o desmentido la veracidad de la información publicada por Wikileaks, sin embargo, un portavoz de la agencia dijo a la BBC que “el público estadounidense debería estar profundamente consternado por cualquier filtración de Wikileaks diseñada para dañar la capacidad de la agencia para proteger a Estados Unidos de terroristas y otros adversarios”.
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