Ninguno de nosotros está realmente consciente de lo peligroso que es compartir todo –y quiero decir TODO– en nuestras redes sociales. Todo lo que subimos a internet deja una huella y aunque lo borres siempre habrá una manera de llegar a lo que hiciste.
Facebook es más que un lugar en donde compartimos y nos reencontramos con amigos o familiares. Gracias a que en la red social pones información sumamente personal cualquiera que haga la más mínima búsqueda puede saber tu fecha de nacimiento, dónde estudiaste, si te graduaste, si terminaste la prepa, si abandonaste la carrera, si te mudaste, si tienes pareja o hermanos, la última película que viste, la última canción que escuchaste, la más reciente fiesta a la que acudiste, tu correo electrónico, tu número telefónico, si estás empleado, si te casas, si te divorcias, cuando eres soltero, dónde estás, los libros que has leído, la música que escuchas, si practicas deporte, tus intereses y actividades y cientos de cosas más.
Si no conoces los candados de seguridad que se ofrecen y no los implementas, cualquiera puede entrar a ver todo lo que acabo de enlistar; me refiero a que tu prima metiche podrá ver a qué fiesta te fuiste cuando le dijiste a tu mamá que te ibas a estudiar a casa de una amiga. La buena noticia es que puedes impedir que una hecatombe pase simplemente cambiado todos los ajustes de la privacidad.
Para evitar que tu vida “privada” sea de conocimiento familiar, debes tener un estricto filtro de seguridad en tus ajustes. En las siguientes imágenes verás cómo tengo configurado mi Facebook; de este modo –casi– NADIE puede encontrarme, solamente “Amigos de mis amigos”. Esto quiere decir que cualquier persona que no tenga amigos en común conmigo no podrá encontrarme aunque escriba mi nombre completo o mi correo electrónico. Esa misma información (correo y teléfono) es visible únicamente para mis amigos. Quizás para algunos sea una medida exagerada, pero es impresionante la facilidad con la que puedes encontrar información de cualquier persona aunque no la conozcas.
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Puedes hacer un experimento. En Facebook busca una persona, inventa un nombre. Entra a su perfil y verás cómo en menos de 5 minutos sabes: fecha de cumpleaños, estado civil, dónde vive, qué estudia y al menos una película o un grupo musical.
Por ejemplo, encontré una persona cualquiera. En tiempo récord supe que: estudió en el IPN de Tepepan, trabaja como coordinador de entregas en “El Trebol”, vive en México, su cumpleaños es el 24 de septiembre, nació en 1986, está casada con Oscar desde el 24 de octubre del 2005; por sus últimas publicaciones puedo adivinar que está embarazada, se fue de vacaciones a León, Guanajuato, en abril de este año y en marzo estuvo en Cuernavaca, Morelos. En cuanto a música le gusta Franco De Vita y le gustan mucho las películas de Disney; lo mejor de todo es que no necesité mandarle un poke o solicitud de amistad para saber todo esto.
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En cambio, la siguiente imagen muestra cómo usuarios que no son mis amigos ven mi perfil y se encuentran con una gran e inmensa nada. Mi información y, quizás lo más importante, la información de mis amigos está oculta porque he restringido el acceso a mi lista de amigos, así que nadie puede saber quiénes son mis contactos ni acceder a sus perfiles.
Procura siempre revisar el estado de la publicación que estás por hacer, asegúrate que sea: "Friends" o "Amigos", así como todos tus estados, fotos, videos, eventos, etc. En los ajustes de privacidad procura que estén similares a los que te muestro y dentro de tu perfil puedes editar quiénes pueden ver tus gustos y aficiones.
