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Gracias Facebook por evitar que hackearan mi cuenta


Hace días amanecí con un agobiante mensaje en mi celular que señalaba que mi cuenta había sido bloqueada por seguridad. Gracias a Facebook, no pasó nada.

por: Celia Ramírez Zolezzi Celia Ramírez Zolezzi

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Hace unos días amanecí con un agobiante mensaje en mi celular que señalaba que mi cuenta había sido bloqueada por seguridad, pues se había detectado un intento fallido de acceder a mi cuenta desde una ubicación nueva o desconocida en un pequeño y exótico país europeo.

 

Recuerdo la primera vez que me hackearon una cuenta. Quizás hace 15 años difícilmente se podría haber hablado de hackeo, pero la sensación fue la misma: frustración y pánico.

 

Entonces no había tanta consciencia sobre la seguridad y los peligros de internet y era fácil descuidarse y dejar tu cuenta de correo sin cerrar sesión en alguna computadora pública. En realidad, era tan poca la consciencia sobre la seguridad y el poder de tomar control sobre una cuenta, que el incidente no pasó de una serie de mails eliminados y el cambio (de muy mal gusto) en los ajustes de mi firma de correo. Después de unos días me di cuenta del hecho, regresé los ajustes a la normalidad y cambié mi contraseña. Un daño vergonzoso, pero mínimo, comparado con lo que podría haber ocurrido si me hubieran cambiado la contraseña y robado para siempre mi correo.


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Aunque uno podría pensar que solo las grandes corporaciones, ricos y famosos son el blanco de los hackers, en el mundo de hoy cualquier persona puede ser víctima de un ataque, ya no hablemos de un experto y excéntrico hacker escondido en un oscuro sótano en Rusia, sino de personas cercanas a nosotros. O al menos que alguna vez lo fueron.

 

Los peligros de la promiscuidad digital

Con más de 16 años manejando distintas cuentas de servicios digitales se podría decir que tres ataques, o al menos tres intentos de ataques, no son algo para preocuparse. El primer blanco fue mi correo electrónico, muchos años después Twitter y en el último año Facebook, dos veces.

 

La popularidad de la red social de Zuckerberg y la complejidad de las relaciones humanas hacen que probablemente Facebook sea una de las plataformas más cotizadas para hackear, no solo por el morbo de conocer nuestra actividad o acceder a nuestras conversaciones privadas con otros, sino por el daño potencial que puede generar el tomar el control sobre nuestras cuentas.


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Si bien Facebook nos ayuda a conectarnos con nuestros seres queridos y mantenernos en comunicación con personas en cualquier del mundo, hemos llegado al punto de regalarle acceso a nuestra vida privada e intimidad incluso a personas que casi no conocemos, a personas con las cuales cruzamos caminos brevemente y que quizás nunca más volveremos a ver.

 

Eventualmente, esta promiscuidad digital puede convertirse en una amenaza. Para algunos podría sonar un tanto dramático, pero ¿qué tan recomendable es en realidad dejar abierta esa ventana a nuestras vidas a personas con las que no convivimos para nada y que, en realidad, ni siquiera tenemos el interés de establecer una relación profunda de amistad? En mi experiencia, nada recomendable.

 

¿Qué tal fácil es hackear una cuenta de Facebook?

Si en algún momento has tenido una mala experiencia con Facebook, seguro te has hecho esta pregunta. O bien, si estás del otro lado (peligroso) y estás planeando cómo acceder a la cuenta de alguien más.

 

Para tranquilidad de quienes hemos sido víctimas de un intento de ataque a nuestro Facebook, la realidad es que es muy complejo intentar acceder al Facebook de alguien más, especialmente si has tomado todas las medidas necesarias para proteger tu cuenta.

 

Como sea, no deja de ser aterrador que al buscar el término “cómo hackear” en Google, la opción de auto complete más popular sea Facebook. Tanto en inglés, como en español, lo que habla de la gran cantidad de usuarios que están buscando cómo acceder al Facebook de alguien más.

 

 

¿Cómo proteger al máximo tu cuenta de Facebook contra "hackers"?

Después de algunas malas experiencias he aprendido a ser muy selectiva con mi Facebook. Más que una cuestión de paranoia, se trata de entender que la información es poder, y en cualquier caso creo que mientras menos información personal propague sobre mi, al menor número posible de “amigos”, mejor.

 

En ese proceso, y después de cometer algunos errores, he aprendido a no caer en las "trampas" de Facebook, que siempre busca la forma de extraer más información sobre nosotros, de que compartamos más imágenes, de que regalemos más datos y momentos personales con la mayor cantidad de personas.

 

Entiendo que la idea detrás de Facebook es justo esa, conectarnos con otros. Y si no nos gusta, nadie nos obliga a usar Facebook. La realidad es que el problema no es Facebook, sino que, por desgracia, Facebook no fue creado pensando en que muchas personas buscan aprovecharse de toda la información que aloja, o que muchas personas se obsesionan con otras y no saben manejar bien sus emociones.

 

En este complejo mundo digital, el enemigo no es Facebook, ni cualquier otra red social, sino nuestro desconocimiento sobre cómo proteger mejor nuestras cuentas y nuestra privacidad. Por eso, es importante que como usuarios activos de la plataforma dediquemos el tiempo necesario en las secciones de Seguridad, Privacidad, Biografía y etiquetado (Menú- Configuración) para cerciorarnos de que tenemos los máximos filtros disponibles para solo compartir nuestros contenidos con nuestros amigos cercanos, y no con todo el mundo (Público).

 

Una opción interesante es la opción de activar el Acceso Restringido, en el apartado de Bloqueo, una opción intermedia que puede resultar útil para acomodar a aquellas personas que aún no estés listo para eliminar de tu Facebook y que tampoco necesites bloquear, pero con quien preferirías no compartir algunos contenidos más personales.

Por otro lado, si ya has sido sujeto de algún intento de ataque, es recomendable activar las aprobaciones de inicio de sesión usando tu celular como intermediario. Conocida también como Verificación de dos pasos, esta medida de seguridad garantiza que nadie más pueda acceder a tu cuenta, a menos que tengan tu celular físico en sus manos, ya que cualquiera que quiera acceder desde una ubicación nueva o desconocida se topará con un mensaje que le indicará que debe ingresar un código que te llegará a ti a tu teléfono, por lo que simplemente sus intentos resultarán fallidos.

 

En fin, las opciones hoy en día para proteger tu cuenta de Facebook son bastante robustas, así que si no has sido víctima de ningún ataque o intento de ataque, no está de más que revises tus configuraciones. Como dicen por ahí, más vale prevenir que lamentar.


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No dejes de revisar la opción de ¿Qué ven otros en mi biografía?, desde los accesos directos de Privacidad en el menú principal. Te sorprenderá darte cuenta que, por alguna razón u otra, dejaste pasar algo que no te gustaría que cualquier persona vea o sepa de ti, ya sea que alguien te esté stalkeando o simplemente que te estén buscando en Facebook o internet.

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