Hace 10 años una de las redes sociales que cambiaría la historia del internet y de la forma en que interactuamos en línea lucía así:
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Y cuando muchos apenas empezaban a unirse, lucía así:
A lo largo de esta década hemos visto cómo la imagen se ha modificado, se han agregado nuevas funciones para compartir y bloquear; han llegado y se han ido varias características, pero si algo podemos reconocerle es que sigue conservando su esencia: la de compartir los momentos más relevantes con tus amigos (principalmente), con tu familia (a veces) y con tus conocidos (cada vez con más precaución).
Pero si para nosotros parece abrumador ver en retrospectiva la cantidad de recuerdos que hemos dejado en Facebook, imagínense lo que siente el mismísimo Mark Zuckerberg al ver el impacto que ha generado el proyecto que inició en una habitación de universidad, pensamientos que por supuesto nos compartió a todos esta mañana a través de un estado en Facebook:
“Hoy es el décimo Aniversario de Facebook.
Ha sido un increíble viaje hasta ahora, y estoy muy agradecido por ser parte de él. Es excepcional tener la oportunidad de tocar la vida de tantas personas, y trato de recordármelo para dar lo mejor todos los días y tener el mayor impacto que pueda.
La gente siempre me pregunta si yo sabía que Facebook se convertiría en lo que es hoy. ¡De ninguna manera!
Me recuerdo comiendo pizza con mis amigos una noche en la universidad después de haber abierto Facebook. Les dije que estaba emocionado de ayudar a conectar a la comunidad de nuestra escuela, pero que algún día alguien necesitaba conectar al mundo entero.
Siempre pensé que esto era importante —darle a la gente el poder de compartir y permanecer conectados, dándoles la oportunidad de construir sus propias comunidades.
Cuando miro los últimos 10 años que transcurrieron, una pregunta que me hago a mí mismo es: ¿por qué fuimos nosotros los que construimos esto? Nosotros éramos sólo estudiantes. Nosotros teníamos muchísimos menos recursos que las grandes compañías. Si ellas se hubieran enfocado en este problema, hubieran podido hacerlo.
La única respuesta que se me ocurre es: a nosotros nos importaba más… (clic aquí para leer la publicación completa).
Y es que a pesar de ya no ser la red social con mayor crecimiento, su alcance sigue siendo uno de los más grandes, el simple hecho de lograr conectar a un tercio de la población mundial en una década es algo que pocas personas han logrado, por lo cual a pesar de las predicciones acerca del fin de esta red y el declive de popularidad en algunas de sus audiencias, queda bastante claro que queda Facebook para, por lo menos, diez años más -como lo ve el propio Zuckerberg-.
En su publicación Mark Zuckerberg habla de que le emociona más la década siguiente, que la que acaba de cumplir; sin embargo, resulta complicado ignorar la forma en la que esta plataforma cambió la forma en la que nos comunicamos a través de la red, y para muestra bastan estos cinco puntos:
1. “¿Cuál es tu Facebook?”
Todo empieza con esta sencilla pregunta, finalmente si tienes la oportunidad de leer este artículo es probable que tus conocidos sean alguno de los 1,230 millones de usuarios que están en la red social hasta ahora. De ahí comienza el reconocimiento a través de las diversas herramientas que Facebook ha creado para que compartas tus experiencias: fotos, videos, aplicaciones, estados, intereses y hasta mapas. Facebook no sólo cambió la forma en que "nos conocemos" y nos presentamos con los demás, sino en las interacciones que tenemos con otros. Ahora todo se trata de "compartir".
Y si no conoces bien todo lo que puedes hacer con un perfil, vale la pena que le eches un vistazo a la guía de supervivencia básica para todo usuario, lo vas a agradecer.
2. Amor en los tiempos de Facebook
Tampoco es un secreto que esta plataforma haya sido el escenario en el que muchos romances han comenzado, algunos más duraderos que otros. Al principio todo es miel sobre hojuelas porque claro, el hecho de no tener que afrontar una conversación cara a cara le permite a las personas más tímidas hacer preguntas y dejar ver más de sí mismos, cosas que en un plano real podría llegar a ser imposible para ellos.
Y por supuesto que no tiene nada de malo que tu relación haya empezado con “hola” por ahí, el problema viene cuando no sólo es el comienzo lo que involucra a Facebook, sino que el noviazgo gira tanto en torno a esta plataforma que termina convirtiéndose en la misma enfermedad que lo lleva a su fin.
Pero no todas las historias tienen que terminar siempre mal, si no me crees échale un vistazo a este estudio que demuestra que Facebook no daña las relaciones, las personas sí.
3. En donde hay gente, hay dinero
Otra realidad de esta plataforma es que conforme va pasando el tiempo, las marcas encuentran nuevas formas de publicitarse y Facebook les está ofreciendo todo tipo de facilidades. Si llevas con tu cuenta más de 6 años, recordarás que la cantidad de publicidad que existía era prácticamente nula en comparación con la cantidad de anuncios que ves hoy desde que consultas tus notificaciones, ya sea en la app móvil o en la web. A cambio de todo lo que Facebook nos ha dado "gratis", la red social usa nuestra información para presentarnos anuncios especialmente dirigidos a nosotros, que apelan a nuestros intereses y gustos.
4. Es mejor tener menos amigos y más privacidad
Cuando recién abriste tu perfil parecía que entre más amigos tuvieras en tu lista era mejor, y claro, tu perfil es virgen, aún no tienes “cola que te pisen”, pero conforme vas acumulando memorias y tu cuenta se convierte en un baúl de recuerdos de todo tipo, el efecto se produce a la inversa y más bien te tranquiliza saber que sólo las personas cercanas pueden ver todo tu contenido, y en ocasiones entre menos gente pueda encontrar tu perfil, mejor.
Por ello se han enfocado en fortalecer las políticas y opciones de privacidad para todas las personas, de modo que hoy por hoy puedes tener una versión pública y una privada de tus cosas, e incluso dentro de tu misma lista de contactos, decidir con quién quieres compartir determinados momentos.
En pocas palabras funciona como la vida real, después de todo, ¿quién se comporta igual en la casa, en la escuela y con sus amigos?
5. La adicción a Facebook, ahora en tu celular
Aunque los teléfonos ya comenzaban a hacerse populares por su conexión a Internet cuando Facebook comenzó a hacerse “la página de moda”, el impacto no es para nada similar al que se tiene hoy. En sus comienzos todos esperábamos a estar frente a una computadora para ver qué se decía de nosotros y qué pasaba con la vida de nuestros amigos, hoy toda esa información viaja en nuestro bolsillo y se actualiza cada que desbloqueamos la pantalla de nuestro celular.
Día con día se van mejorando las cualidades del ecosistema móvil de Facebook a tal grado que hoy una persona podría no tener una computadora y aún así gozar de todos los beneficios que ofrece Facebook, tanto en cuestión de contenido, como de privacidad y comunicación.
Habrá quienes tengan más cosas que reclamarle que agradecerle a Facebook, pero dudo mucho que haya una persona que no tenga al menos un buen recuerdo de alguna experiencia en donde Facebook haya sido intermediario, y quizá para refrescarte la memoria ayude un video que te muestra tu propia historia en esta red social desde que decidiste unirte y hasta ahora. Verlo es muy sencillo, sólo da clic aquí.
