No estamos hablando de un modelo nuevo, ni uno con la última tecnología; tampoco el más potente. De hecho se trata de un modelo ya de unos cuantos años atrás, lo que conocemos como un Clásico. De ahí la razón por la cual su valor aumenta cada vez más.
Como cada año se realiza el famoso Concurso de Elegancia de Pebble Beach, mundialmente reconocido por exponer los mejores autos clásicos y nuevos lanzamientos y conceptos de todas las marcas automotrices. También es donde tiene lugar la mayor subasta de autos organizada por Bonhams.
La pugna más alta fue para un Ferrari 250 GTO de 1962, convirtiéndose en el auto más caro, por el cual se pagaron 38 millones 115 mil dólares.
Este Ferrari, del cual sólo se fabricaron 36 unidades, cuenta con un motor V12 de 3.0 litros, con transmisión manual de 5 velocidades.
El récord anterior lo tenía un Fórmula 1 Mercedes-Benz W196R de 1964, subastado el año pasado por 29.65 millones de dólares. Se dice que en el mismo año un coleccionista estadounidense llamado Paul Pappalardo vendió a un comprador anónimo un Ferrari 250 GTO de 1963 en 52 millones de dólares, aunque aún no se han corroborado los hechos, por lo que, al día de hoy, el Ferrari con número de chasis 3581GT es el auto más caro.
