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Adicto a las selfies atenta contra su vida al no lograr la foto perfecta


Un adolescente llamado Danny Bowman de sólo 19 años pasó alrededor de 10 horas diarias tomándose fotografías a sí mismo hasta que su adicción casi le cuesta la vida.

por: Alejandra Ramos Barreda Alejandra Ramos Barreda

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Un adolescente llamado Danny Bowman de tan sólo 19 años pasó alrededor de 10 horas diarias tomándose fotografías a sí mismo con su iPhone para lograr la selfie perfecta. Sin embargo, su obsesión cada vez se hizo más fuerte y como resultado dejó la escuela, aislándose del mundo por completo durante 6 meses, lo que lo llevaría a una depresión tan grande que intentó quitarse la vida.

 

Como muchos adolescentes hoy en día, Danny empezó a subir fotografías a Facebook dentro de los parámetros de lo normal; sin embargo, su aspiración a ser modelo y el rechazo de una agencia fueron el detonante de su obsesión.

 

Actualmente, este joven británico considerado como el primer “adicto a las selfies” en el mundo se encuentra recibiendo terapia para combatir su adición a la tecnología y otros trastornos obsesivos compulsivos, los cuales son los causantes de crear una preocupación excesiva sobre su apariencia física.

 

En una entrevista con The Mirror, Danny Bowman declaró: “Yo estaba constantemente en busca de tomar la selfie perfecta y cuando me di cuenta que no podía, me quería morir. Perdí a mis amigos, mi educación, mi salud y casi pierdo mi vida.”

 

El caso de Danny Bowman podría parecer un tanto absurdo a simple vista; sin embargo, es una de las consecuencias y peligros a los que muchos adolescentes se enfrentan en esta era de la tecnología, en donde la necesidad de aprobación y los estereotipos de belleza son alejados de la realidad y en donde, en muchas ocasiones, la manipulación tecnológica de las imágenes lleva al deseo de una realidad inexistente.

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