El 11 de enero de 2023, el tipo de cambio entre el peso mexicano y el dólar está cotizado a 18.9821 pesos por dólar. Este declive en la moneda estadounidense se produjo a las 11:55 a.m., siendo la primera vez desde febrero de 2022 que el tipo de cambio está por debajo de 19 unidades.
Desde 2021, el dólar ha comenzado un proceso de retroceso en el mercado de divisas mundial, y según los analistas, es probable que siga disminuyendo a corto plazo. Sin embargo, se espera una recuperación en el mediano plazo.
Los expertos mencionan que es posible que la cotización del dólar en México cambie el 12 de enero cuando el gobierno de Estados Unidos publique sus datos de inflación de diciembre de 2022. Esta información determinará si el tipo de cambio subirá o bajará en México.
Si el mercado ve la publicación como una buena noticia que confirme la tendencia a la baja en la inflación, es probable que el tipo de cambio se mueva a 18.94 pesos por dólar. Por otro lado, si el mercado ve que la inflación sigue a la alza, el tipo de cambio podría aumentar, superando los 19.00 pesos mexicanos.
Estos movimientos en la moneda mexicana frente a la estadounidense están relacionados con la recesión económica que experimentó EUA el último año debido a la alta inflación y la subida en la tasa de interés. Al observar la apreciación del peso frente al dólar, se espera que las decisiones económicas de la FED durante 2023 sean menos agresivas que las del año pasado.
¿Cómo impacta el dólar en la economía de México?
El valor del dólar en México puede tener consecuencias tanto negativas como positivas para la población. El dólar tiene un efecto directo en la inflación en México, y su depreciación puede llevar a una disminución en los precios de varios sectores, como la ropa y los alimentos. Además, viajar al extranjero es más económico cuando el dólar está más débil.
Sin embargo, hay otros sectores que son afectados por la depreciación del dólar, especialmente aquellos que se dedican a la exportación, los inversionistas y aquellos que reciben remesas. Las empresas que exportan a Estados Unidos o a otros países reciben un pago menor por sus productos, y sus costos de producción pueden disminuir.
Las personas que tienen acciones cotizadas en dólares pueden experimentar una pérdida en sus ganancias. Del mismo modo, el sector turístico puede verse afectado por un tipo de cambio más bajo.
Por último, aquellos que reciben remesas de Estados Unidos pueden experimentar una disminución en sus ingresos si el dólar sigue perdiendo valor en el mercado mexicano.
