MOXIE es el nombre corto para el Experimento de Utilización de Recursos In Situ de Oxígeno en Marte, donde se resolvió la producción de oxígeno en el planeta vecino a partir de su atmósfera. El experimento forma parte de la misión Perseverance, que llegó al planeta rojo en febrero del año pasado.
El experimento constó de un total de siete pruebas, que se puso en marcha desde el mes de abril. En ellas, MOXIE debe dividir las moléculas de dióxido de carbono (CO2), separando las moléculas de oxígeno y emitiendo monóxido de carbono como desecho. La unidad lo consiguió en todas las pruebas, llegando a producir hasta 6 g de oxígeno por hora, el equivalente al ritmo de producción de un árbol de tamaño modesto.
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"Se trata de la primera demostración de la utilización de recursos en la superficie de otro cuerpo planetario y de su transformación química en algo útil para una misión humana... En ese sentido es histórico", dijo el investigador Jeffrey Hoffman, del MIT.
Un pequeño gran paso para la colonizacion
Hay que destacar que MOXIE tiene un tamaño pequeño. Se le ha comparado con el de un tostador común. En el futuro, se espera desarrollar unidades MOXIE de mucho mayor tamaño, que puedan emular la producción de oxígeno de centenares de árboles y de forma continua.
Por ahora, se planea experimentar con MOXIE en la primavera, cuando la densidad atmosférica y la presencia de CO2 son más altas, permitiéndole operar tanto como sea posible con el fin de alcanzar la mayor cantidad de oxígeno que pueda producir.
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